La adopción de la micromovilidad no solo avanza desde la compra de particulares sino que también lo hace por medio de los servicios de movilidad compartida.

En Europa 268.281.268 usuarios han utilizado esta manera de moverse en el último año según las cifras publicadas por Micro-Mobility for Europe (MmfE).

Servicio de bicicletas compartidas en Madrid.

Estos números son repartidos entre usuarios de patinetes y bicicletas eléctricas, siendo el primero el más utilizado con 240 millones y 28 millones el segundo.

El relevamiento de la asociación que promociona la micromovilidad dentro de la Unión toma en su muestra a 24 países y 515 ciudades que aplican estos servicios.

Las cifras también dejan ver que se han utilizado 700.560 patinetes eléctricos y 79.917 bicicletas eléctricas.

Además, estos han recorrido 535 millones de kilómetros por las ciudades de Europa.

Lesiones por la micromovilidad

Si bien la demanda de servicios de micromovilidad compartida en Europa siguió aumentando en 2022 con un 39 % de aceptación en comparación con 2022, la tasa de lesiones de e-scooter que requieren tratamiento médico se ha reducido en casi un 20 % en comparación con 2021.

El riesgo de fatalidad ha disminuido un 17,7% en comparación con 2021.

Patinetes compartidos en París antes de la prohibición.

Al comparar los modos de transporte, los datos muestran que el  riesgo de lesiones que requieren tratamiento médico es comparable entre los scooters eléctricos compartidos y las bicicletas eléctricas compartidas.

En Alemania, donde la cantidad total de kilómetros recorridos en bicicleta se puede deducir de un informe ministerial disponible, se observa un riesgo similar de incidente fatal en un patinete compartido que en bicicletas.

A principios de 2023, MmfE publicó  los primeros datos de su tipo de 2021 sobre patinetes compartidos en un esfuerzo por contribuir con evidencia a la discusión pública sobre seguridad vial. 

En los datos de incidentes recientemente publicados de 2022, incluye datos sobre bicicletas eléctricas compartidas además de e-scooters.

“Esperamos que estos conocimientos ayuden a informar las conversaciones y las políticas de seguridad vial en la Unión que reducen los riesgos de incidentes para los usuarios vulnerables de la vía”, expresó Sebastian Schlebusch, Líder de Iniciativa en MMfE.

Inconvenientes con los patinetes en París

Hace no más de un mes París tomó la decisión, mediante un referéndum público, de prohibir los patinetes eléctricos de alquiler.

Caso llamativo, siendo que esta fue la primera capital en incluirlos.

“La tendencia en realidad va en la dirección opuesta. París es un caso atípico, ya que incluso otras ciudades de Francia como Lyon, Grenoble, Burdeos y más están extendiendo sus programas”, comenta Arnau Pérez, responsable de Relaciones Institucionales de Lime.

Siguen una inclinación global, donde Nueva York, Londres, Roma, Chicago y casi todas las demás grandes urbes están extendiendo permisos y expandiendo sus programas.

A esto Pérez agrega: “Lime continúa innovando y trabajando arduamente para ubicarse como el proveedor multimodal número uno y hacer que las bicicletas eléctricas y patinetes eléctricos compartidos sean más accesibles para más personas”.

Una ciudad que siguió por ese sendero fue Barcelona.

Se trata de la única gran sin patinetes eléctricos compartidos, dando lugar a un crecimiento de los de uso particular.

De esta manera, se está privando a las personas de las ventajas del modelo.

Este tipo de prohibiciones suelen acarrear “consecuencias para todos los ciudadanos” que probablemente experimenten una aglomeración en el transporte público y un mayor tráfico en las carreteras.

A pesar de ello, la empresa operadora de patinetes y scooters eléctricos, ha registrado un aumento del 27% de nuevos usuarios.

Lo que se tradujo en un incremento del 30% en el número de viajes si se toma para la comparación el año 2022 con 2021.