El compromiso de las diferentes ciudades de América Latina para su progresiva descarbonización está asumido. 

El informe “Hacia ciudades inclusivas, sostenibles e inteligentes”, publicado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) revela, en ese sentido, cuáles son las metas de electromovilidad que se plantearon las diferentes capitales del sur del continente: Bogotá, Buenos Aires y Santiago de Chile. 

Y vale un repaso para ver en qué están trabajando para cumplir con esas metas, ya sea por el tiempo de inclusión de vehículos eléctricos, el uso de fuentes de energía o compromisos para que el transporte público opere con bajas o cero emisiones. 

Bogotá

Todos los vehículos de servicio público o particular que circulen en el Distrito Capital deberán operar para el año 2040 con motores eléctricos o tecnologías cero emisiones de material particulado. 

Bogotá tiene taxis eléctricos con 12 años de servicio y licencia para operar hasta 2027. También hay buses alimentadores que tienen más de 10 años y siguen operando, y la flota gigante de 1.500 buses eléctricos con nueve patios de servicio. 

Estos buses evitan la emisión de 94.300 toneladas de CO2 al año. Para poner esto en perspectiva, es el equivalente a lo que producirían 42.000 carros particulares en el mismo periodo de tiempo, según indica la página de la Alcaldía de Bogotá. 

¿En qué están trabajando?

BYD, de los mayores jugadores en el segmento de buses eléctricos, se alista para la licitación de buses articulados. Debería iniciar en julio para abastecer a los buses que recorren las rutas por la avenida 68 y que lleguen a Soacha.

Además, a fines de abril se anunció el desembarco en la planta de Hino del primer bus eléctrico para armarlo en Colombia. Todos los componentes llegan de China para ser ensamblados por Hino; luego se entregará a Superpolo para carrozarlo.

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Buenos Aires

Incentivar la movilidad limpia mediante la reducción de aranceles de importación para vehículos de bajas emisiones. 

Reducir las emisiones de gases contaminantes a partir del Plan de Movilidad Limpia 2035. Además, se prevé la compra de 350 buses eléctricos en toda Argentina a 2035 y se planea dentro de las metas que para el 2030 el 10% de los buses sean eléctricos y el 30% para el 2050.

Los dos buses eléctricos de Buenos Aires.

Al año 2019, se tenían en operación dos buses eléctricos con distintas tecnologías de carga y proveedores.

Vale aclarar que Mendoza y Santiago del Estero son otras de las ciudades que tienen en circulación -y en mayor número- buses eléctricos de la firma Corven. 

¿Qué se viene?

El gobierno porteño avanza con un proyecto de circulación de buses eléctricos para que transiten en el casco histórico y San Telmo, tal como ocurre en las áreas antiguas de las principales ciudades del mundo.

Para ello, trabaja -como una de sus metas- en un llamado a licitación internacional previsto para fines de mayo con el objetivo de que los buses comiencen a circular a fin de año.

La empresa ganadora deberá hacerse cargo de la operación y de la provisión de los buses mientras que el único gasto en el que incurriría la Ciudad sería el de construir las cabeceras de carga eléctrica y acondicionamiento de los micros.

Recientemente, el Ministerio de Economía anunció un paquete de medidas para la industria automotriz compuesto de rebajas de aranceles para mejorar la competitividad y estimular las exportaciones, pero no se hace mención a ventajas impositivas para la importación de vehículos eléctricos. 

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Santiago de Chile

Entre las metas, que el 20% de los buses en el área metropolitana serán eléctricos y el 100% de las ventas de transporte público (buses, taxis y colectivos) serán cero emisiones para el 2035.

Santiago lidera en el sur del continente.

La capital chilena alcanzó la cifra de 2.000 buses cero y bajas emisiones en el sistema Red Movilidad, representando el 31% de la flota total.

Este avance consolida a Santiago como la ciudad fuera de China con la mayor cantidad de buses eléctricos.

La instalación de 12 electro terminales, con el más reciente siendo el de mayor potencia, impulsó la operación de 184 buses eléctricos en la zona oriente de la ciudad.

El proceso de transformación iniciado en diciembre de 2022 buscó que 2 de cada 3 buses cumplieran con el estándar eléctrico o Euro VI.

Actualmente, Red cuenta con 4.260 buses de alto estándar, superando la meta con 2.411 buses ecológicos o Euro VI y 1.849 buses eléctricos circulando por Santiago.

¿Próximos pasos?

En diciembre pasado se llamó a licitación para incorporar 1.200 nuevos buses eléctricos al transporte público de la capital. Y, si todo marcha de acuerdo a los tiempos previstos y con las metas planteadas, para 2025 las unidades estarían en la calle.

Esta licitación incluirá el 30% de las rutas de la capital. La idea es introducir continuamente nuevas unidades y tecnologías, evitando la concentración del mercado y renovando la flota de manera constante.

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