Así, según ha señalado el director de Nueva Movilidad, Electrificación y Desarrollo Internacional de Stellantis, Richard Meyer, en la presentación de los modelos de Opel, Peugeot y Citroën de hidrógeno, para este año y el que viene las unidades ascenderán a 1.000 en todo Europa.
Para el año 2025, Stellantis espera superar las 10.000 del año anterior, ya que aumentarán la gama al extender el sistema de propulsión al segmento de los vehículos comerciales pesados y comenzarán las entregas de las primeras unidades en el mercado estadounidense.
Así, los Opel Vivaro, Peugeot Expert y Citroën Jumpy con propulsión de hidrógeno, que se transforman de eléctricos a hidrógeno en la fábrica de Stellantis en Rüsselsheim (Alemania), ofrecen un repostaje más rápido, así como una autonomía mayor y el acceso a las zonas de las ciudades con restricciones.
Los tres modelos, que se pueden encargar en dos longitudes (L2 y L3), presentan la misma capacidad de carga que sus homólogos: una carga útil de 1.000 kilogramos, así como una capacidad de remolque de 1.000 kg.
Los tres modelos equipan un nuevo sistema «eléctrico de pila de combustible de hidrógeno enchufable de media potencia» que se compone de una pila de combustible que produce la electricidad necesaria para impulsar el vehículo gracias al hidrógeno a bordo del depósito y una batería recargable de iones de litio de alto voltaje que puede recargarse en la red eléctrica y que también alimenta el motor eléctrico durante algunas fases de la conducción.
La batería de tracción de los modelos homólogos eléctricos se sustituye por tres depósitos de hidrógeno de 700 bares (4,4 kg de capacidad de hidrógeno), con una autonomía combinada de hasta 400 kilómetros (350 kilómetros de hidrógeno y 50 de la batería eléctrica) en ciclo WLTP en sólo tres minutos de carga.
Así, la pila de combustible de 45 kilovatios proporciona suficiente potencia para conducir largos tramos en la autopista, mientras que al arrancar o acelerar, la batería de iones de litio de 10,5 kilovatios-hora (kWh) situada bajo los asientos delanteros proporciona apoyo para cubrir los picos de carga. Cada uno de los modelos incluye un cargador trifásico de 11 kilovatios y cable de carga modo 2.
Stellantis entregó las primeras unidades de estos vehículos a clientes a finales del año pasado en Alemania y Francia. Dos mercados de hidrógeno que han sido impulsados por sus gobiernos, con incentivos para mitigar los costes extra que supone el despliegue de esta tecnología de propulsión.
En Europa se estima que se invertirán 60.000 millones de euros para 2030 en estaciones de hidrógeno. El país germano cuenta ya con 100 estaciones de hidrógeno, mientras que en Francia son 50 las que hay actualmente disponibles.