Dio inicio la última ruta eléctrica del año, que tiene como sede inaugural a Santiago de Chile.

“Las rutas eléctricas son una iniciativa de la sociedad civil”, remarca Silvia Rojas Soto, presidente de la Asociación Latinoamericana de Movilidad Sostenible (ALAMOS) y directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica (ASOMOVE), en el acto inaugural.

La Ruta del Cono Sur se planificó en tres etapas al igual que el resto. La primera es un estudio técnico sobre los cargadores presentes para evaluar la situación y llevar a cabo el recorrido.

En la misma línea, la segunda etapa consiste en identificar dónde se necesitan los dispositivos para efectivizar la ruta.

Y la tercera es promocionar la electromovilidad en la comunidad. 

El camino comenzará en la capital chilena para, luego, cruzar el ancho de Argentina hasta llegar a Buenos Aires. Después, pasará por Punta del Este, tomando dirección hacia el norte hasta arribar a San Pablo y cerrar en Asunción.

“El concepto de la ruta eléctrica del Cono Sur es dar a conocer la movilidad sostenible y el propósito es romper mitos”, afirma Rodrigo Salcedo, presidente de la Asociación de Vehículos Eléctricos de Chile (AVEC).

En definitiva, el foco está puesto en el funcionamiento de la ruta en sí y en seguir difundiendo la tecnología y la seguridad de los vehículos eléctricos en América Latina. 

«Invitamos a diferentes representantes de marcas, vehículos livianos, micromovilidad y transporte de pasajeros para acercar a la gente la movilidad sostenible», comenta el presidente de AVEC en un mano a mano con Mobility Portal Latinoamérica.

Y agrega: «Las invitaciones están orientadas para saber cómo funcionan los autos, cuál es su kilometraje y sus beneficios».

 Al mismo tiempo, las compañías de infraestructura de carga, por supuesto, no se quedaron atrás y están presentes en estas palabras de presentación. 

Hacia el futuro, Salcedo promueve la aplicación de políticas públicas con respecto a la infraestructura. 

Desde AVEC, planean un 2024 con «eventos de este tipo en lugares céntricos de Latinoamérica», según Salcedo, con el objetivo de que confluya una gran cantidad de gente.

Vale mencionar que Chile es un país modelo en cuanto a electromovilidad, en comparación al resto de la región. 

Con respecto a la política pública y reglamentaciones actuales, el país posee una estrategia nacional desde el 2017 llevada a cabo por tres ministerios: Ambiente, Transporte y Telecomunicaciones, y Energía. 

Por otro lado, el crecimiento de la electromovilidad en Chile demuestra el gran desarrollo en el parque automotor. Pero también en la instalación de cargadores públicos cuya cantidad llega al número de 1.146.

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Rutas Eléctricas anteriores

Si bien es motivo de festejo la realización de la ruta del sur, vale recordar que es producto de mucha labor previa. 

Este trabajo cuenta con la puesta en marcha de otros recorridos en años anteriores, los cuales configuran la base de estos proyectos de asociaciones como AVEC y ALAMOS.

El comienzo fue en 2021 con la ruta que unió San José de Costa Rica con Ciudad de Panamá, para luego seguir un año con la Ruta Centroamericana, que recorrió Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá.

La tercera fue la Ruta Eléctrica Andina, situada en Colombia, Ecuador y Perú. 

La última, que se realizó en la Región Norte, tuvo como sedes a México y a Guatemala. 

Allí quedaron 10 países conectados por cargadores rápidos y semirrápidos cada 250 kilómetros.

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