Rexel Spain está teniendo un 2022 exitoso en general y especialmente en el desarrollo de sus soluciones de movilidad eléctrica y en concreto de puntos de recarga. Con el impulso y las obligaciones que han dado desde las administraciones y empresas privadas, su facturación se ha visto beneficiada.
“En los últimos años este negocio creció mucho, se instalaron miles de equipos de recarga. Aunque es un negocio nuevo y partíamos de pocas unidades instaladas, los crecimientos fueron muy fuertes”, afirma Eugenio de la Rosa Niño, Director de Compras y Marketing de la empresa.
Las palabras de De la Rosa se reflejan en los datos de facturación de Rexel Spain de este año, aún sin finalizar: ha cuadruplicado los ingresos en materia de puntos de recarga y productos relacionados a su instalación.
“Nos quedan periodos de madurez con crecimientos que serán más fuertes en este negocio. No veníamos de grandes cifras de venta en los años anteriores y aprovechamos 2022 renovar nuestra oferta en movilidad
eléctrica, donde nuestra compañía destaca por aportar una solución
completa para cualquier instalación”, comenta el director de compras.
Este último año, Rexel Spain aprovechó para firmar acuerdo con nuevos partners para ofrecer una amplia gama de cargadores y los resultados se ven en las cifras.
Además, la empresa comenzó un proceso formativo interno y externo, especialmente dedicado a instaladores, para hacer de sus tareas más eficientes.
También sumaron herramientas informáticas para que la elaboración de la oferta o la elección del producto sean más eficientes.
Pero, ¿por qué 2022 fue un año tan decisivo? “Hay una tendencia en el mercado a interesarse de lleno por el vehículo eléctrico, existe un componente social muy fuerte en su favor”, admite De la Rosa.
Con esto el director de compras hace alusión a las restricciones impuestas por Europa a los vehículos térmicos y también los impulsos y objetivos que decretó el Gobierno Español.
“Cuando un usuario tiene que adquirir un vehículo no tiene del todo claro, qué vehículo tiene que adquirir, pero se va a clarificando cuál es el futuro y parece ser eléctrico”, afirma De la Rosa.
Es por eso que admite que las infraestructuras de recarga deben ir por delante de las ventas de coches para garantizar que estos tengan donde recargar y que esté todo dispuesto una vez que la movilidad sea eléctrica.