Este mes será aprobada la normativa Euro 7 para los vehículos diésel y a gasolina. ¿Qué sucederá? Para el 1° de enero de 2027, todo los coches homologados deberán emitir la mitad de lo que hoy -al tratarse de uno a diésel- y un 40% menos -uno a gasolina-.
Esto plantea dos interrogantes: ¿qué sucederá con la fabricación de los nuevos motores y cómo el coche eléctrico se ve “favorecido”?
Ricard Puiggros, senior advisory consultant en emovili: “Esto hará muy difícil que los fabricantes inviertan en nuevos motores diésel, pensemos que el fin del motor de combustión es el 2035 y las fechas son muy próximas”.
En diálogo con Portal Movilidad España, plantea el porqué la industria de la automoción se encarecerá y hará “más competitivos” a los coches eléctricos.
Por un lado, si un fabricante desea invertir en un motor diésel no tendrá tiempo de amortización. Y por otro, el de gasolina será el que sí tendrá una apuesta en dinero, pero su precio se incrementará.
En principio, se elevará debido a que sus motores deberán tener una tecnología muy superior a la que hoy tienen. Es así que los productores de vehículos deberán encarecer el coste para continuar obteniendo ganancias.
“Subirá de precio, sobre todo en los utilitarios económicos porque desde ahora deberán tener un sistema de embarcado que hasta ahora no tenían”, comenta Puiggros.
Todo esto genera un panorama positivo para el eléctrico, pero no para la industria de la automoción. El coste del vehículo térmico se elevará. Sin embargo, el de la tecnología cero emisiones se mantendrá, según explica el especialista.
A fin de cuentas, los costes se equiparan y lo que se tomará en cuenta es el coste de mantenimiento, donde el coche eléctrico lleva las de ganar por su bajo precio de conservación.
“El hecho es que se va a acabar el vehículo de diésel antes de lo estimado”, afirma el senior advisor consultant en emovili.
Otro punto a favor de los vehículos eléctricos es que para ese momento tendrán un mejor valor de reventa, ya que existirá un mercado más maduro y con mayor oferta.
Pero, el último punto mencionado también será perjudicial al eléctrico, según aclara Puiggros. Considerando su alta demanda, el precio no disminuirá y se mantendrá estable.
“Ahora es cuando más barato están. Si tienes la oportunidad de comprarte un eléctrico ahora, hazlo”, sostiene.
Y además, añade: “El coche será un lujo y no será para todos los sectores. La movilidad pasará por los servicios compartidos”.