La 27ª conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 27) llegó a su fin sin permitir calmar las ansias en torno a la transición a un transporte de cero emisiones.
Frente a las conclusiones que hoy todavía siguen saliendo a la luz y tratativas de nuevas regulaciones que están comenzando a establecerse a nivel europeo, el Secretario de Estado de Movilidad Urbana de Portugal, Jorge Delgado define los tiempos en que debe darse la transición a las cero emisiones en el transporte pesado.
“La fecha ideal es lo antes posible, pero hay que tener en cuenta las diferencias en la economía de las operaciones de transporte”, sostiene el funcionario al ser consultado por Portal Movilidad España por los plazos que ve considerables.
A lo que agrega: “La tecnología de los autobuses eléctricos está evolucionando rápidamente y los precios están bajando con la producción en masa”.
En la actualidad, gobiernos como el de Portugal están apoyando la diferencia en el precio de adquisición debido a la brecha que aún queda entre el E-Bus y el ICE Bus.
“Estoy seguro de que esta disparidad se eliminará antes de lo esperado”, asegura.
En noviembre se iba a dar inicio a los diálogos en torno a las fechas para limitar la venta y fabricación de camiones y autobuses con motores a combustión, pero hasta el momento no ha habido novedades claras.
Se espera que el proceso avance de una manera similar a la tratativa que se le ha dado a los vehículos ligeros y que se desarrolle este debate que ya cuenta con fechas tentativas presentadas por parte de diferentes organizaciones.
“Confiamos en alinear el ecosistema de la movilidad para poder fijar estos objetivos”, manifiesta Delgado a la vez que destaca la importancia de acuerdos internacionales.
“Tanto el Memorando de Entendimiento sobre Vehículos Medianos y Pesados de Emisión Cero (ZEM HDV) son claves en este proceso e invitamos a suscribir a todos los países y partes”, añade.
Desde Transport & Environment (T & E) se está impulsando que el año para dar el gran paso sea el 2035.
En su parecer, el 2030 es la apuesta más segura para el clima, pero las reducciones requeridas pueden ser demasiado pronunciadas para implementarlas sin interrupciones
Es por ello que el 2035 sería la última fecha factible para alcanzar el 100 % de ventas de vehículos con cero emisiones.
Asimismo, se busca que se revisen estándares, tales como:
- Establecer una meta de reducción de CO2 del 100 % para camiones medianos y pesados en 2035.
- Establecer un objetivo de ventas 100 % cero emisiones en 2027 para autobuses urbanos, en 2035 para camiones pequeños y autocares, y en 2040 para camiones profesionales
- Elevar la ambición del objetivo de reducción de CO2 para 2030 a -65 % para camiones medianos y pesados.
- Introducir objetivos provisionales en 2027 para acelerar la transición y de eficiencia energética para remolques.
El sector en estado crítico
“El transporte es el principal sector que no va por buen camino en la reducción de emisiones a nivel mundial”, apunta en diálogo exclusivo con Portal Movilidad España Jorge Delgado.
Desde su lugar considera primordial que el próximo año se cuente con un día de negociaciones enfocados a poner las necesidades que hoy aparecen bajo un llamado de acción más ambicioso, como lo fue el pasado «Transport Day» en el 2021.
En la COP 26 esa jornada marcó grandes hitos. Reunió a más de 200 países y empresas bajo el compromiso de poner fin a los motores a combustión entre 2035 y 2040, entre otros tantos acuerdos.
Pese a esto, se lanzó la Coalición Accelerating to Zero (A2Z), la cual funciona como el siguiente paso para asegurar compromisos más ambiciosos para una transición de vehículos de cero emisiones alineada con el Acuerdo de París.
Anunciado en el «Día de las Soluciones”, más de 200 partes interesadas señalaron su compromiso con una transición rápida hacia el transporte sin emisiones.
La Coalición conecta a organizaciones líderes en el mundo para crear una plataforma para ayudar a comprender, desarrollar e implementar políticas y planes que colaboren con la meta de cero emisiones.
“Retrasar no es una opción”
Desde la óptica del funcionario portugués, en este contexto es primordial trabajar en conjunto y seguir avanzando hacía los objetivos que se han planteado a 2050.
“Tenemos que ir juntos, ya que retrasar no es una opción”, remarca Jorge Delgado.
Se ha visto una tendencia en las últimas conferencias a retrasar objetivos y hasta a dar lugar a “falsas soluciones”, como han retratado organizaciones internacionales, pero frente a ello el funcionario portugués no se permite vacilar.
“Cada día hay más ejemplos de que la transición es tecnológicamente factible, económicamente viable y permite pensar en fuertes externalidades positivas en en términos sociales”, añade en este sentido.
Esto puede ser ejemplificado con el caso de Portugal.
El país tomó COP 27 para demostrar su ambición y la decidida apuesta que ha estado desplegando, cosa que permite hasta colocarlo como ejemplo para otras naciones.
En el marco de la conferencia de cambio climático el Gobierno anunciaba que se encuentra en camino de acelerar su paso a las cero emisiones, fijando la neutralidad climática para el 2045 en vez del 2050.
“Estamos trabajando con países, ciudades y empresas afines para lograr esta meta, que sólo es posible con una fuerte promoción del transporte público sostenible, la producción de energía verde y el fin de las centrales eléctricas de carbón”, explica el funcionario en este marco.
En lo que respecta a electromovilidad se trabaja con la misma energía e impulso.
La Unión Europea adoptó la estrategia de hacía la movilidad eléctrica y en este marco ha lanzado un Reglamento de Infraestructura de Combustibles Alternativos, que se está negociando para imponer objetivos muy concretos en cuanto al despliegue para la recarga de vehículos eléctricos en Europa.
En lo que respecta al mismo, Portugal ya está cumpliendo los deberes.
“Contamos con una muy buena densidad de puntos de recarga. Somos el cuarto país de la región con más postes por cada 100 km de carretera. Pero este es un objetivo en movimiento”, reconoce al respecto.
Mientras más personas y empresas opten por utilizar coches electrificados, más demanda de infraestructura requerirán y se está trabajando para poder dar respuesta a la demanda que ya se está gestando.