“España va muy retrasada. El país cuenta con alrededor de 140 mil vehículos eléctricos que están muy lejos de los 5 millones a los que debemos llegar para 2030”, señala Carlos Rico, Policy Officer de Transport and Environment.
En rueda de prensa, la organización manifestó sus consideraciones hacia una movilidad sostenible antes de la presentación del próximo 14 de julio del paquete legislativo europeo “Fit for 55”.
Transport and Environment pide a la Unión Europea enfocarse en una revisión de objetivos de reducción de CO2 para coches y furgonetas.
“Solo podremos conseguir una movilidad eléctrica con un endurecimiento de los estándares de CO2 que permita un abaratamiento de estos vehículos”, apunta.
Con esta medida esperan que los costes de un coche electrificado y uno a combustión sean equiparables para 2025 – 2027. Además, la organización resalta como barrera en el proceso de cambio a vehículos cero emisiones la falta de infraestructura.
“Haría falta un despliegue potente de puntos de recarga en lugares públicos”, remarca Rico.
Infraestructura de combustibles alternativos
Desde la organización aseguran que se debe fomentar el despliegue y el uso de combustibles alternativos y sostenibles como el hidrógeno verde y el amoníaco de origen renovable.
“Hay que cambiar el mandato actual que fomenta el uso de gases fósiles por uno para desplegar combustibles verdes en los puertos de la Unión Europea”, indica Carlos Bravo, consultor de la organización.
Asimismo, el portavoz resaltó que es necesario dar incentivos para lograr la descarbonización del sector marítimo, además de utilizar medidas como cobrar a los barcos por el CO2 producido en sus rutas.
Además, también expresó que era una opción “errónea” invertir en infraestructura de combustibles que no van a ser utilizados a largo plazo.
“El gas natural no va a poder ser porque es un combustible fósil, entonces es absurdo invertir en él, lo que tenemos que dar es prioridad al uso de combustibles verdes”.