El reciente paquete fiscal presentado por el Gobierno tenía entre sus componentes una eliminación inmediata de los incentivos que actualmente posee el sector de la electromovilidad en Costa Rica.
Sin embargo, el Ministerio de Hacienda redactó mociones para corregir esta intención.
Al respecto, Mariano Avalos, cofundador de EV Imports, explica en diálogo con Portal Movilidad:
“Para que la quita de beneficios ocurra se debería modificar la ley N° 10.209 que promueve el uso del transporte eléctrico”.
Y agrega: “Además, la moción tendría que obtener mayoría en la Asamblea Legislativa. Honestamente no creo que esto vaya a pasar, no lo veo viable”.
Vale mencionar que la normativa en cuestión establece la exención de determinados aranceles para vehículos cero y bajas emisiones, como del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y del Impuesto Selectivo de Consumo y sobre el Valor Aduanero.
No obstante, con el tiempo las exenciones se irán reduciendo hasta llegar al punto en el cual los electrificados pagarán las mismas tasas que los a combustión interna, según lo estipulado en la ley.
En este sentido, Avalos indica: “Creo que los incentivos a la electromovilidad seguirán existiendo porque, al ser progresivos, son sostenibles en el tiempo”.
Importación responsable en electromovilidad
EV Imports comenzó importando carros eléctricos usados. Pero, debido a la pandemia de coronavirus y la faltante de semiconductores, los precios tendieron a subir y el mercado “no aceptó el sobreprecio”.
Tiempo después, la compañía dejó de lado la venta de vehículos de segunda mano y comenzó a comercializar de manera formal los automóviles de Tesla.
“Tesla, al no tener concesionarios en Costa Rica, trabaja por venta directa. Entonces, todo esto requería contar con una capacitación técnica adecuada para ser intermediarios y ofrecer un buen servicio”, reconoce Avalos.
Y añade: “En síntesis, importamos los carros y, además, les ofrecemos los repuestos y todo aquello que la unidad requiere. Hay una necesidad de capacitación para darles un buen soporte y venderlos de manera adecuada y responsable”.
Asimismo, cabe destacar que EV Imports también comercializa vehículos eléctricos de otras marcas, como Volkswagen, Honda, Chevrolet y Toyota.
Sin embargo, a pesar de los inventivos, la compañía no está exenta de dificultades a la hora de ofrecer los automóviles.
“Existen importadores que se esconden detrás del escritorio, porque importan las unidades, pero no brindan ni garantías, ni servicios. Ellos venden los carros a precios más bajos y así es difícil competir”, comenta el cofundador.
“En cambio, nosotros tenemos costos fijos porque contamos con un showroom y pagamos la renta, también impuestos y salarios a empleados”, aclara.
Lo cierto es que, a diferencia de EV Imports, muchos otros concesionarios no ofrecen garantía extendida en los vehículos, ni poseen talleres de servicio especializados en autos eléctricos y repuestos.
“Esto, en temas de electromovilidad, causa disgustos a los consumidores. Si bien compran el carro a un precio más barato, a veces cuando llega la unidad notan que no funciona y el importador no le puede brindar soporte porque no tiene los conocimientos necesarios para dar un adecuado respaldo”, explica Avalos.
Y agrega: “Con las tecnologías nuevas debería haber una importación responsable, las compañías tendrían que contar con mecánicos, talleres y lugares donde la gente pueda mostrarles su carro si tiene algún problema”.
Bancos que financian electromovilidad
En Costa Rica existen bancos que ofrecen apoyo para facilitar la adquisición carros eléctricos y la consecuente transición hacia la electromovilidad.
Por ejemplo, Banco Credomatic ofrece un préstamo para vehículos nuevos y seminuevos con plazo de pago de hasta 96 meses.
No obstante, Avalo sostiene: “Generalmente, los entes financieros están asociados a las agencias tradicionales, las cuales están atrasadas en electromovilidad. Les asusta la transición porque piensan que perderán el servicio que ofrecen de autos a combustión”.
“Algunos de ellos buscan que los bancos no financien los eléctricos de importadores pequeños como nosotros. Hay un tema de intereses”, aclara.