La semana pasada, el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) informó que “en vista del interés de usuarios particulares por acceder al uso del gas como combustible por sobre la gasolina”, desde el 21 de septiembre se autorizará aumentar la antigüedad exigida a los autos, de cinco a siete años.
Se trata de una modificación informada en el Decreto Supremo N° 98 de 2022, que permitirá no solo equiparar la exigencia que actualmente rige para los taxis que buscan utilizar gas, sino que también aumentar hasta en 500 mil vehículos el potencial universo de autos que pueden acceder a este cambio.
En el país, los vehículos a gas actualmente no están sujetos a restricción vehicular durante el periodo de gestión ambiental, lo cual se transforma en una ventaja adicional para quienes busquen una alternativa de movilidad sustentable.
Todo el discurso oficial gira en torno al uso de combustibles alternativos y menos contaminantes y la movilidad sustentable, pero ¿qué ocurre con el reglamento que permitirá la conversión de vehículos de combustión interna a eléctricos? Aún está en manos de Contraloría.
Al respecto, Tomás Sanchez, CEO de EV South, expresó a Portal Movilidad: “Es una buena iniciativa hacia la movilidad sustentable y a prolongar la vida útil de nuestro parque automotriz, incentivando la compra de un vehículo usado para convertirlo a gas”.
No obstante, refirió: “Sin embargo, nosotros en EV South seguimos a la espera de la normativa que permitirá convertir vehículos convencionales a eléctricos, reduciendo en un 100% sus emisiones contaminantes y con un ahorro en combustible significativamente superior”.
Por su parte, Gonzalo Pacheco, CEO y fundador de Movener, comentó a Portal Movilidad que le parece muy buena la búsqueda permanente y el fomento de una movilidad ecológica con menor impacto ya que efectivamente el gas contamina menos y tiene mejor rendimiento medioambiental que otros tipos de combustibles que se usan actualmente.
“Ahora bien, cuando uno busque una movilidad ecológica hay distintas categorías y efectivamente la de convertir a eléctrico es mucho más eficiente que convertir a gas. Por lo tanto, el punto relevante es acelerar la normativa en retrofit eléctrico ya que tiene un mayor impacto positivo al medioambiente”, apuntó.
El profesional sostiene que hay un desafío cultural de entender y saber técnicamente que la electromovilidad finalmente es la opción más atractiva y conocer las ventajas de lo convertido porque reutiliza lo que ya existe.
Pacheco sostiene: “El gas no es una competencia, sino que complementa el relato. Así como se fomenta esto, se debe fomentar lo eléctrico”.
Según indicó el ministro Juan Carlos Muñoz al anunciar esta modificación de decreto, un vehículo a gas permite ahorros en costos de combustible de hasta un 35%, sumado a un nivel de emisiones que fluctúa entre un 60 y un 70% menos de material particulado, respecto a un auto a bencina.
Las palabras del funcionario sobre la medida fueron: “No solo permite aumentar el potencial números de personas que desee acceder a este tipo de adaptaciones, sino que, más relevante aún, nos permite seguir promoviendo el uso de una movilidad sustentable y eficiente”.