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miércoles 12 de julio de 2023
Opinión: ¿Es realmente la carga bidireccional el futuro de la movilidad eléctrica?
Iván Tallón Country Manager Iberia de Wallbox.
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La movilidad eléctrica es una realidad y el cambio hacia ella sucederá tarde o temprano. Sin embargo, aunque en algunos países como Estados Unidos o la zona norte de Europa la electromovilidad está muy desarrollada, no ocurre lo mismo en España o Sudamérica.

En estos casos, la sociedad todavía necesita un impulso para dar el paso definitivo y comprometerse con unos hábitos de consumo más sostenibles.

Para que la movilidad eléctrica se convierta en una prioridad, primero de todo es necesario dar respuesta a las demandas de los conductores: buenos modelos de fiscalidad y una red de carga pública extensa.

Otro estímulo para el avance de la movilidad eléctrica puede ser el hecho de que el vehículo eléctrico abre la puerta a un nuevo sistema de gestión energética.

Con un cargador bidireccional, el vehículo eléctrico puede tanto cargarse como suministrar la energía que tiene almacenada en la batería a una casa, una oficina o alimentar la propia red eléctrica.

Esto abre muchas posibilidades: la primera, el paso definitivo a las energías renovables, dado que se trata de un tipo de energía que debe ser consumida en el momento en que se produce, sino se pierde. Así, la batería del vehículo eléctrico puede servir para almacenar esta energía y consumirla más tarde o incluso devolverla a la red y ganar dinero por ello.

Estudios realizados por Wallbox han demostrado que, al utilizar la carga bidireccional, los usuarios pueden ahorrar hasta 1.000 euros al año y compensar la creciente presión en la red eléctrica.

La segunda posibilidad que se abre con un cargador bidireccional es que este nuevo modelo da el poder de decisión al consumidor.

Así, el vehículo eléctrico se convierte en la pieza fundamental de la transición hacia el uso de fuentes de energía renovable y el cargador bidireccional en el centro de la gestión energética de la casa.

Eso porque el vehículo de cero emisiones nos permite unir diversos elementos y hacer una gestión integral de la energía. Esta tecnología bidireccional de carga no sólo representa el futuro, sino que para Wallbox es ya una realidad.

Por otro lado, al devolver energía a la red doméstica, el usuario puede cargar su vehículo aprovechando las tarifas horarias más baratas y aprovechar la energía acumulada en el hogar en los momentos de mayor demanda energética, lo que conlleva un beneficio.

Desde Wallbox vamos más allá de la movilidad eléctrica y por eso estamos desarrollando nuestros productos partiendo de la base de que el vehículo eléctrico es mucho más que una solución de movilidad; es una batería de gran capacidad sobre ruedas.

España, por ejemplo, ya tiene capacidad para producir más del 50% con fuentes renovables. Pero tiene un gran problema: la oferta y la demanda deben coincidir, ya que no hay sistemas para almacenar esta energía.

Esto nos lleva a perder muchas oportunidades. La solución la tenemos, está disponible, y es tan sencilla como un vehículo eléctrico y un cargador bidireccional.

Wallbox fue pionera en lanzar un cargador bidireccional para uso doméstico, el Quasar, que llegó al mercado en 2020. Ahora, Wallbox acaba de presentar su evolución, Quasar 2. A diferencia de su primera versión, este nuevo cargador bidireccional utiliza el estándar europeo de carga (CCS, por sus siglas en inglés), lo que le hace compatible con los vehículos europeos.

Pero, para ello, es necesario que los fabricantes de coche pongan de su parte y produzcan vehículos eléctricos que sean bidireccionales.

Recientemente, CUPRA ha anunciado el lanzamiento de CUPRA Born de 77 kWh, que es precisamente el primer coche eléctrico de una firma europea compatible con Quasar 2.

Desde su fundación, Wallbox está centrada en desarrollar productos y servicios que apoyen el cambio de paradigma no sólo de la movilidad sino también de la gestión energética. Todo ello, con el vehículo eléctrico como piedra angular.

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