La Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica (ENME) incluye metas hacia las próximas tres décadas. El mismo fue enviado a la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (CONAMER), a fin de recibir comentarios por parte de expertos y de la industria.

A partir de ello, en el Oficio No. CONAMER 23/3381, suscripto por el Dr. Oscar Mendoza Contreras, director de Política y Regulación Ambiental, establece el rechazo de exención del Análisis de Impacto Regulatorio (AIR).

El mismo implica la necesidad de un AIR para que se justifiquen las obligaciones o acciones que pudieran recaer sobre particulares.

También se establece el requerimiento de respuesta a los comentarios realizados en el ámbito de la CONAMER.

Ellos versaron, según el oficio, sobre los siguientes puntos:

• Posible duplicidad de regulaciones.
• Dudas sobre la coherencia jurídica y posible contradicción con otras normas que pudiera generar una antinomia jurídica.
• Falta de participación de dependencias que pudieran estar involucradas en el objeto de la estrategia.
  Dudas respecto de las cifras de vehículos pesados que se establecen en el documento.
• “Invalidez” de la justificación de la ENME toda vez que los acuerdos de la COP27 no habrían sido refrendados por el Estado mexicano.
• Incapacidad material y técnica para llevar adelante los objetivos.
• Dudas respecto de la efectividad de la electromovilidad para paliar el cambio climático.
• Las implicaciones de la ejecución de plan para el sistema eléctrico nacional.
• Aportaciones relativas a establecer metas a corto, mediano y largo plazo sobre las ventas de vehículos eléctricos para aportar “certidumbre” a la industria.

Los comentarios realizados incluyen planteos como el siguiente:

“La Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica (ENME) debe contemplar directrices que aborden las emisiones a lo largo de todo el ciclo de vida de los vehículos, desde su fabricación hasta su desecho o reciclaje, incluyendo también la generación de energía eléctrica a partir de fuentes renovables en esta cadena”.

A partir de ello, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) debe justificar y considerar los comentarios así como las consideraciones de la CONAMER para dar curso a esta política pública.

Cabe destacar que la misma fue elaborada por más de 250 actores del sector público, privado, académico y de la sociedad civil.

“Se ha generado un proceso continuo de gobernanza que se ha puesto en marcha a través de los Grupos de Trabajo Especializados (GTE) encargados de generar sinergia y una acción coordinada de las distintas instancias participantes”, reza el documento.

Actores involucrados en la formulación de sus metas y acciones de la ENME.

A su vez, cabe destacar que la ENME no establece “responsables” ni “consecuencias” sobre el no cumplimiento de las metas.

La misma busca establecer prioridad sobre las acciones que hay que llevar adelante para el desarrollo de la movilidad eléctrica en el país:

“La ENME se posiciona como un instrumento rector para acelerar la transición en México hacia una movilidad eléctrica de bajas emisiones. Este cambio tecnológico permitirá a México abrir un nuevo capítulo para el sector transporte, maximizando los beneficios sociales y ambientales que trae consigo desde un enfoque que prioriza el transporte público para el beneficio de la población en general”.

De finalizar los procesos burocráticos, el acuerdo por el que se expide la estrategia entraría en vigor cuando se publique en el Diario Oficial de la Federación.

Sinergias y metas de la ENME

En principio, la estrategia dispone la sinergia entre proyectos de actualidad vinculados a la movilidad eléctrica en México, como Litio Mx y el Plan Sonora.

La articulación de estos actores daría como resultado un desarrollo de los recursos como el litio y las energías renovables alineados con la transición en el parque vehicular.

Respecto a las metas de la ENME, se disponen horizontes hacia 2030, 2040 y 2050. Aquí uno por uno:

A 2030

• La venta de vehículos ligeros y pesados se integrará por un 50 % de unidades cero emisiones, compuesto por vehículos eléctricos e híbridos eléctricos conectables.

• La electrificación del transporte coadyuvará a reducir de manera acumulada al 2030, 30 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (MtCO2e).

Con base en las tendencias actuales, se considera que será alcanzado gracias a la introducción de por lo menos 7 millones de vehículos ligeros (21.3 MtCO2e) y 338,000 vehículos pesados (2.8 MtCO2e por autobuses eléctricos y 5.8 MtCO2e por vehículos de carga eléctricos), en el periodo de 2022 a 2030.

• Las diez ciudades y zonas urbanas del país con más altas emisiones de GEI y de contaminantes climáticos de vida corta (CCVC), habrán incorporado vehículos eléctricos en sus sistemas de transporte público.

• Se desarrollará un sistema de carga eléctrica público, para vehículos eléctricos ligeros y pesados, tanto en las ciudades como en las principales carreteras de México.

• Se promulgará normatividad de homologación de cargadores eléctricos.

A 2040

• El 100% de las ventas de vehículos ligeros y pesados de pasajeros, será de vehículos eléctricos e híbridos conectables.

• Coadyuvará a reducir de manera acumulada al 2040, 129 MtCO2e, que será alcanzado gracias a la introducción adicional a la flota al 2030, de 22 millones de vehículos ligeros (75.8 MtCO2e) y 894,000 vehículos pesados (7.6 MtCO2e por autobuses eléctricos y 15.3 MtCO2e por vehículos de carga eléctricos).

• Se contará con un sistema de cargadores eléctricos suficientes, abiertos y homologables en las 10 principales ciudades del país para vehículos ligeros y pesados.

• Se contará con un sistema de cargadores eléctricos suficientes, abiertos y homologables en las carreteras federales, tanto para vehículos ligeros como pesados.

A 2050

• El 100 % de las ventas de vehículos ligeros y pesados de pasajeros, será de vehículos eléctricos.

• Se logrará reducir de manera acumulada en el periodo 2022 a 2050, 272 MtCO2e, que será alcanzado gracias a la introducción adicional a la flota del 2040, de 31 millones de vehículos ligeros (117 MtCO2e) y 987,000 vehículos pesados (8.4 MtCO2e por autobuses eléctricos y 17 MtCO2e por vehículos de carga eléctricos).

• Se consolidará un sistema eléctrico para vehículos eléctricos pesados (de carga) en las carreteras estratégicas del país.