“¡Mirad lo que hemos recibido hoy en nuestras oficinas!”, anunciaron desde la cuenta de Twitter de la empresa, que cuenta con la mayor red de carga rápida y ultrarrápida, junto a la foto de un lector de tarjetas de crédito.
A los pocos minutos de la publicación sus usuarios no tardaron en comenzar a dejar consultas y mensajes de aliento sobre la posibilidad de que estos dispositivos lleguen a solucionar un problema vigente hace ya tiempo.
Plantando intriga, desde Easy Charger no dieron muchos detalles en sus redes sociales, pero sí en diálogo con Portal Movilidad.
“Para mediados de 2022 pondremos en todos nuestros cargadores rápidos y ultra rápidos puntos de venta de este tipo, de esta manera cada cliente al llegar y abonar con cualquier tarjeta de crédito o débito, sin necesidad de estar registrado en alguna app”, declaró Daniel Perez Guitierrez, CEO de Easy Charger España.
Según detalló esto no ha sido una decisión de último momento, sino que hace ya tiempo han estado trabajando en el desarrollo de esta solución para el pago de vehículos eléctricos que estará presente en los más de 100 cargadores que hoy en día tienen operando.
En este marco, reflexionó: “Entendemos que el mercado va a ir en este sentido, por eso desde Easy Charger apostamos a la implementación de estos modos de pagos de manera masiva para ser los primeros”.
Este trabajo se ha basado principalmente en afrontar dos desafíos: la implementación y la integración con una plataforma de pago externa.
En un primer lugar, poder implementar estos sistemas no ha sido tarea fácil. El representante de la empresa ha explicado que “hasta que no se consiga tener conexiones lo suficientemente estables no se podrán terminar de instalar estas terminales”.
En segundo lugar, la implementación de este tipo de pagos estuvo fuertemente ligada a la integración, lo que es un “tema verdaderamente complejo”.
Las tareas en torno a la integración de los sistemas de los cargadores con una plataforma de pago externa, la cual depende de un banco, una entidad de pagos y una empresa que medie todo esto, se ha requerido un minucioso desarrollo.
Una vez solucionados ambos problemas, pudieron emprender el despliegue de los sistemas, el cual va apenas retrasado por el la falta de recepción de ciertos insumos.
En un principio la completa implementación estaba planeado para el primer trimestre del 2022, pero este lanzamiento se postergará hasta mediados de ese mismo año.
Reconociendo la gran inversión que ha requerido este anuncio, destacaron que el principal objetivo es “no trasladar el impacto monetario de este nuevo servicio a los usuarios. Por lo tanto, los gastos que se está realizando quedarán dentro del margen de la empresa y no se requerirá un incremento de los precios de las recargas”.