El Gobierno colombiano lanzó un spot donde comunica su visión respecto a la producción y usos del hidrógeno, como parte de su política marcada por la transición energética. 

Allí deja en claro que el transporte es pieza clave dentro de la estrategia. 

“Lo que se busca con el hidrógeno verde fundamentalmente es llegar a nuevos mercados, donde no se ha electrificado de una manera rápida”, afirma Sergio García, líder técnico del Fondo de Energías No Convencionales y Gestión Eficiente de la Energía (FENOGE). 

Y agrega: “Por ejemplo, el sector transporte es el que más contamina, el que más gases de efecto invernadero genera. Es un gran objetivo que podamos llegar con otros energéticos y el hidrógeno”. 

En ese sentido, García asegura que, en la actualidad, la mira se encuentra en el “transporte masivo” y en “ciudades con vehículos de carga pesada”. Tampoco se descarta el uso del energético en barcos y aviones. 

Vale recordar que el FENOGE participó del proyecto de buses a hidrógeno en Bogotá. 

En marzo, la empresa Transmilenio presentó la primera unidad de Colombia, que estará a prueba por ocho años y empezará a rodar como piloto hacia julio. 

La inversión total fue de 22 mil millones de pesos, de los cuales el FENOGE otorgó nueve mil millones; Ecopetrol, alrededor de ocho mil millones; y Fanalca, unos cuatro mil millones. 

La unidad cuenta con una autonomía de 450 kilómetros diarios con una sola carga, podría transportar unos 98.500 pasajeros al año y evitar 135 toneladas de dióxido de carbono. 

“Ese proyecto nos puede dejar muchos aprendizajes para continuar con el tema de movilidad”, visualiza García. 

El hidrógeno como un bastión de Gobierno para la movilidad

Por su parte, el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, también ofrece su mirada: 

“Puede reemplazar cualquier combustible fósil que usamos cotidianamente. Es un potencial energético que se puede utilizar de diferentes maneras”. 

Luego, añade: “Hay grandes aplicaciones que podemos explorar y desarrollar. En el mundo, ya se están haciendo trenes impulsados por hidrógeno, vehículos de carga y de pasajeros. En el transporte hay grandes oportunidades”. 

Si bien la eficiencia energética, la electrificación y las energías renovables pueden lograr el 70% de la mitigación necesaria, según la Agencia Internacional de Energías Renovables, se necesitará hidrógeno para descarbonizar usos finales, donde otras opciones son menos maduras o más costosas, como el transporte de larga distancia. 

Considerando estas aplicaciones, el hidrógeno podría contribuir con el 10% de la mitigación necesaria para alcanzar el Escenario IRENA de 1,5°C y el 12% de la demanda de energía final.

No obstante, dificultades como los costos e inversiones dificultan esta implementación. 

“El hidrógeno verde puede convertirse en alternativa con diferentes aplicaciones. Con el desarrollo de pilotos probablemente podamos responder con mayor profundidad las potencialidades que tenemos”, destaca el ministro de Energía.

Y concluye: “De la mano de las energías renovables viene directamente la oportunidad del hidrógeno verde en el país. Nuestro propósito es el desarrollo muy fuerte de las energías renovables en Colombia”.