Tras ser anunciada la licitación para la construcción de polos industriales en corredor Istmo de Tehuantepec, también se incluirán un paquete de incentivos para que empresas del sector de la electromovilidad asienten inversiones.
Los incentivos comprenden la reducción del 100% del Impuesto Sobre la Renta (ISR) durante tres años y hasta un 90% en los tres siguientes. Esto último dependerá de variables como el número de puestos de trabajo creados.
También la exención del IVA en las operaciones en el interior, inclusive dentro de los mismos polos y la depreciación desacelerada de las inversiones por un período de seis años.
Al respecto, dirigentes de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Industria Nacional de Autopartes (INA) se han expedido positivamente.
“Nos parece que esta publicación tiene incentivos fiscales muy atractivos para las empresas”, estima Alberto Bustamante, director de INA
Y agrega: “Lo vemos con buenos ojos, son buenos incentivos. Estamos seguros que ayudarán a las empresas a moverse si así lo deciden a esta zona”.
Por su parte, desde el sector industrial también valoraron positivamente la medida, aunque también expresan cautela frente a su implementación.
“Efectivamente lo que se ha anunciado por parte del gobierno es muy atractivo. Yo creo que es el primer paquete que vemos tan ambicioso o tan extenso de incentivos, lo cual es una buena noticia”, indica Obracir Barquera, director de AMIA.
Con respecto a la ejecución, destaca: “Hay que estar pendiente a la regla de aplicación para ver los detalles. Creo que es importante saberlo y eso es lo que van a requerir las empresas que están considerando invertir en la zona”.
Si bien se acuerda en que es un “muy buen primer paso”, los privados manifiestan que hay que atender necesidades relativas a la infraestructura, el capital humano, la suficiencia de la energía renovable y la seguridad.
Sobre el corredor, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció que en agosto comenzaría a funcionar el tren de carga y luego de pasajeros, comprendiendo 1.548 km.
Se trata de diez parques industriales que conectan al océano pacífico con el atlántico. Cada uno de esos terrenos será de aproximadamente 300 hectáreas.
Además de la movilidad eléctrica, también se invita a participar de la convocatoria a empresas dedicadas a la actividad eléctrica y electrónica.
Se suman las ligadas a dispositivos médicos; farmacéutica; agroindustria; equipo de generación y distribución de energía eléctrica (energías limpias); maquinaria y equipo; tecnologías de la información y la comunicación; metales y petroquímica.
El presidente precisó que este proyecto será inaugurado a más tardar en septiembre de este año. Se trata de una apuesta a la infraestructura que está orientada con la estrategia de nearshoring que apunta a concretar el gobierno.
¿Más incentivos para la electromovilidad?
En materia de beneficios para la proliferación de la producción y la adopción de esta tecnología en el país, se esperan notificas por parte del ejecutivo.
En primer lugar, aún es un pendiente la publicación de la Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica (ENME), que debiera emanar de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
En segundo lugar, en las próximas semanas la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) conformará las mesas de facilitación para la ejecución de la hoja de ruta publicada a principio de año por el canciller Marcelo Ebrard.
La misma fue elaborada por el sector público, privado y académico de Estados Unidos y México y se centrará en el desarrollo de la infraestructura y el capital humano.
Por último, AMIA propuso al gobierno nacional la creación de un Plan Nacional de Electromovilidad, el cual apunta a mejorar las condiciones para la producción y adopción de vehículos eléctricos en el territorio nacional.
Respecto a ello, en el mes de marzo se han vendido más de 5.000 unidades electrificadas. Esta cifra representa el 4,4% del total de comercializaciones registradas.