Se realizó el especial sobre movilidad eléctrica en Argentina organizado por Portal Movilidad donde participó Roberto Stazzoni, responsable del segmento vertical de electromovilidad en ABB. Allí desplegó los motivos por los cuales la correcta elección del cargador y los espacios es fundamental para incentivar la movilidad eléctrica.
“Hoy un cargador se constituye en un elemento de marketing. A quien lo solicita hay que explicarle que, si bien va a realizar la menor inversión posible para sacarle el mayor provecho, la idea es no matar el negocio. Sucede que se pone un cargador de baja potencia en un lugar semipúblico por lo que el usuario no puede satisfacer sus necesidades y eso atenta contra el propio modelo”, sostiene.
ABB vivió dos hitos este año en el país: el lanzamiento del cargador domiciliario y la puesta en marcha del primer cargador rápido del país propiedad de YPF en el Automóvil Club de Palermo, Buenos Aires con miras a convertirse en un punto de partida para ver crecer las redes de infraestructura sobre todo con carga rápida y se le pueda permitir a los conductores salir del rango de autonomía sin preocupación.
En ese sentido, comenta: “Está el interés, el compromiso y, en algunos casos en los privados, el dinero para la inversión. Lo que nos falta es una visión orgánica”.
“Cuando están claros los ‘para qué’, se ordenan y se aseguran los ‘cómo’. Este ‘cómo’, que es poner los cargadores, con qué potencia, dónde y cuándo, estará acompañado de un ‘para qué’. Ahí es donde se espera que estén más claras las políticas de Estado en cuanto a movilidad sostenible, que las autoridades de aplicación a nivel nacional tomen una decisión para que despegue de manera organizada y no dupliquemos esfuerzos que saturen de infraestructura de carga algunos lugares y falte en otros”, explica.
Al respecto, destaca que “la movilidad eléctrica no es un tema de moda” y que no se debe perder de vista que es una de las tantas soluciones de mitigación de emisiones de CO2 y frenar la crisis climática. “Ese es el ‘para qué’ que debemos comunicar”, afirma Stazzoni.
Para los vehículos eléctricos particulares lo que sobra es tiempo y la potencia para la carga por lo que no son necesarias grandes sumas den inversión. Estas variables cambian pensando en las cargas eventuales.
En este marco, asegura: “Hoy los costos son altos, sumando el costo del cargador y de potencia, por lo que el factor de utilización podría tener impacto en cobro del servicio al usuario, pero es algo que se debe analizar con el uso estabilizado y pedirles a las distribuidoras que bajen los valores”.
En el debate estuvieron presentes Gustavo Risi, gerente para América en Circontrol; Hugo Di Tofino, jefe del departamento del Calidad de Servicio, Innovación, Movilidad Eléctrica y Nuevos Mercados de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC); Ignacio Capurro, Desarrollo de negocio en Future Grids (eMobiltiy, PV & Storage) de Siemens; Adrián Peragallo, Responsable de Movilidad Eléctrica de Enel X Argentina.