Gracias a un acuerdo entre Ucrania y México surge Fábrica de Electrolineras, una empresa que se dedica a la creación de infraestructura de carga totalmente personalizada.

“Nos distingue la dedicación para lograr la más alta calidad, la personalización completa y una garantía líder en la industria”, señala Vitalii Hordyna, director del departamento de ventas de Fábrica de Electrolineras, en conversación con Mobility Portal Latinoamérica.

El proceso de personalización integral es un pilar fundamental de la empresa.

Es que, Fábrica de Electrolineras brinda un servicio “hecho a medida” para lograr que el cliente obtenga una estación de carga que se adapte a sus necesidades y preferencias.

De esa manera, cada proyecto se vuelve único de acuerdo al diseño exterior y los componentes que se elijan. 

Además, ofrece una experiencia única en diseño 3D que permite ver cómo la infraestructura de carga se integraría en el entorno, ya sea una oficina, una planta o una tienda. 

“En un principio, nuestra idea es hacer la transferencia de tecnología de Ucrania a México”, detalla Hordyna.

En ese sentido, Fábrica de Electrolineras se especializa en dos líneas fundamentales: corriente alterna y corriente continua para uso de acceso público.

En cuanto a la línea de corriente alterna, esta tiene la capacidad de cargar dos vehículos simultáneamente con una potencia de hasta 88 kW. 

Por el lado, de las electrolineras de corriente continua, estos cargadores presentan cuatro mangueras, un diferenciador clave frente a la mayoría de los proveedores en China y Europa que ofrecen solo dos: 

“La capacidad de estas mangueras varía desde 40 kilowatts hasta 500. Además, una de ellas puede utilizarse para corriente alterna. Esto tiene mucho futuro en el mercado”.

Y explica: “Con nuestras electrolineras no es necesario instalar cuatro por cada tipo de coche, podemos instalar una electrolinera para cuatro estacionamientos de carga”.

Además, un aspecto distintivo en su producción es la selección de componentes, cuyos materiales son importados de aproximadamente 10 países.

En este punto, Hordyna destaca el extenso proceso de prueba llevado a cabo por ingenieros durante cinco años en Ucrania, evaluando diversos conectores y cables para garantizar la durabilidad y calidad de sus productos.

Infraestructura hecha a medida

Fábrica de Electrolineras brinda un servicio “hecho a medida” .

“Nosotros no fabricamos el producto con nuestra propia marca, fabricamos  el producto totalmente diseñado de acuerdo al cliente”, indica Vitalii Hordyna sobre la filosofía de la compañía.

El proceso de personalización integral es un pilar fundamental que posiciona a la Fábrica de Electrolineras en la vanguardia de la industria de la movilidad eléctrica.

Sin embargo, no solo se trata de branding y la identidad visual. 

Los clientes pueden adaptar completamente el rendimiento y las características técnicas de acuerdo a sus necesidades específicas.

“Se pueden personalizar todos los componentes que hay por dentro: la potencia, los inversores y las mangueras. Lo único fijo, por ahora, es el gabinete”.

Proyecto de nueva fábrica

«Identificamos potencial y un futuro prometedor en el mercado mexicano», enfatiza el director al hablar sobre la perspectiva de desarrollo de la empresa en México. 

La compañía inició operaciones con una fábrica de ensamblaje en Ciudad de México.

En cuanto a la visión a corto plazo, Hordyna anuncia los planes de establecer una fábrica de ciclo cerrado para producir todos los componentes de las electrolineras en un solo lugar.

De esa manera, la empresa busca optimizar el proceso de fabricación y reducir los tiempos de importación desde Europa y Corea del Sur.

Por otro lado, con el foco puesto en una expansión regional, la Fábrica de Electrolineras tiene como objetivo instalar la próxima fábrica cerca de la frontera con Estados Unidos. 

“Esto nos dará la posibilidad de vender no solo para México sino también Estados Unidos y Canadá», adelanta.

En cuanto a la ubicación específica, Hordyna señala que aún no tienen un lugar definido en el norte del país y que la elección dependerá del acceso a financiación de organizaciones y organismos internacionales financieros. 

“Primero tenemos que empezar con el ensamblaje y tener este producto ya 100% mexicano”, comenta sobre los planes de expansión.

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