Claudia Sheinbaum, alcaldesa de Ciudad de México (CDMX) y candidata a la presidencia, defendió su gestión en materia de electromovilidad. 

“Tenemos un programa muy agresivo de electromovilidad en el transporte público. Mejoramos y ampliamos al sistema Metrobús, que mueve cerca de dos millones de personas con una línea BRT totalmente eléctrica, única en el mundo”, expresa la mandataria en la Cumbre de las Ciudades de las Américas 2023.

A su vez, destaca la propulsión de la “tarjeta de movilidad integrada y sustentable” y explica su conveniencia, apuntando a un obstáculo para la electrificación en CDMX: el esquema hombre camión. 

“¿Qué tiene que ver la tarjeta? Todo el transporte público operado por el Estado la utiliza y estamos avanzando para que el 30% de las concesiones también se incorporen”, explica Sheinbaum.

Y amplía: “Queremos terminar el Gobierno con todo el sistema utilizándose. Esto ordena el transporte a diferencia de los sistemas de hombre camión que funcionan en la ciudad”. 

Desde la Secretaría de Movilidad de la ciudad, se expresa que ese sistema es “improductivo”. El mismo supone pequeños privados que cuentan con una unidad de bus y circulan brindando el servicio con permiso de la autoridad pública competente.

“Es un esquema que se da mucho a lo largo de América Latina. Las personas trabajan bajo el alero de una asociación, pero finalmente los ingresos son los que recolecta el chofer. Si lleva 100 personas, sus ingresos serán 100 tarifas. No están profesionalizados los choferes, tampoco reciben subsidios”, explica Rodrigo Díaz, subsecretario de Movilidad, a Portal Movilidad. 

En el camino hacia la electrificación del transporte público, desde la SEMOVI advierten que primero será necesario finiquitar la existencia de este esquema.

“En las empresas grandes estatales o privadas que operan (sistema BRT, por ejemplo) el salto a la electromovilidad puede ser sencillo porque tienen capacidad de endeudamiento, están profesionalizadas y cuentan con patios”, indica Díaz. 

Y destaca: “El gran problema lo van a tener las pequeñas empresas, lo que llamamos el hombre camión”. 

Desde el Estado se avanza en un proceso de aglutinamiento de los pequeños operadores en estructuras más grandes que les permitan proyectar la adquisición de buses eléctricos. 

Por su parte, Sheinbaum también defendió a la electromovilidad como un instrumento para reducir desigualdades.

“El transporte público, utilizado por el 70% de los habitantes de la ciudad, no sólo deben ser concebido como un sistema de reducción de gases de efecto invernadero y de impacto ambiental sino un proyecto de justicia social”, indica la referente.

Cabe recordar que la mandataria tiene voluntad de competir por la presidencia de México en las próximas elecciones de 2024. Siendo la candidata con más intención de voto por el momento, se encuentra compitiendo con su compañero de espacio en Morena y canciller Marcelo Ebrard.

Ambos cuadros han tenido un rol relevante en materia de movilidad eléctrica en distintas órbitas de gestión. Desde su conducción den la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Ebrard ha desplegado iniciativas y concretado inversiones, como las de Tesla en Santa Catarina.

¿Trolebuses o buses eléctricos para fomentar electromovilidad?

El esquema de CDMX contempla las dos modalidades: trolebuses y buses eléctricos, los cuales transitan en aquellos recorridos que no estén cubiertos por los primeros.

Inclusive, además de los 60 buses cero emisiones que circulan por la Línea 3, se incorporarán 55 unidades más que cubrirán estos caminos. 

Según Sheinbaum, desde el Gobierno nacional se aspira a replicar el esquema.

“El presidente ampliará los trolebuses con baterías en el Estado de México. Estos tienen 70 km de baterías y una vida de alrededor de 50 años”, adelantó la mandataria.

Y remata: “Esta inversión se realizará nuevamente dentro de 50 años y no dentro de diez como con los buses eléctricos”.