Con 30 votos a favor, 2 en contra, 1 abstención y 13 ausencias la Cámara de Senadores, se decidió aprobar el rechazo al veto total del presidente de la República Mario Abdo Benítez al proyecto de ley “De incentivos y promoción del transporte eléctrico en el Paraguay”.
Haciendo hincapié en el rechazo del veto, el senador Patrick Kemper habló desde la Comisión de Industria, Comercio y Turismo, remarcando que elaboraron varias mesas de trabajo por el proyecto de ley en cuestión para nutrirlo.
“Debemos recordar que el objeto de la ley es establecer el marco normativo que regule la promoción del transporte eléctrico en el país y el fortalecimiento de las políticas públicas de incentivo en el uso. Para tal efecto, este proyecto regula la organización administrativa pública vinculada al transporte eléctrico”, explicó el parlamentario.
Por su parte, la senadora Esperanza Martínez expresó que resulta preocupante el gesto político del presidente de la República, teniendo en cuenta que Paraguay es un país con tres hidroeléctricas y en el contexto actual las cuestiones ambientales y la crisis climáticas se convierten en un tema de eje político a nivel mundial, obligando a las naciones a tomar como base las herramientas tecnológicas para paliar el avance de la problemática.
“El rechazo a esta reglamentación demuestra la absoluta ausencia de una responsabilidad pública sobre lo que en este momento es un problema serio en el Paraguay: la energía y las oportunidades del cambio del sistema de producción”, puntualizó la parlamentaria según La Nación, sentenciando que, antes de irse, el oficialismo perdió una brillante oportunidad de sentar las bases de un proceso de transformación energética en el país.
El documento regula la organización administrativa pública vinculada al transporte eléctrico, las competencias institucionales y su estímulo, disponiendo también exoneraciones impositivas, incentivos y normas de políticas públicas para el uso de este sistema como transporte de energía limpia.
También existen beneficios medioambientales, ahorrando divisas por dejar de comprar derivados de petróleo, estableciendo una salida a la dependencia paraguaya de los combustibles fósiles.
El documento establece como autoridad de aplicación al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, a través del Viceministerio de Minas y Energía, y exonera por 10 años el impuesto a la importación de los vehículos y de los elementos relacionados a la carga.