La contaminación del aire en las ciudades es en gran medida provocada por el transporte
Uno de los retos de la humanidad es la reducción de la contaminación del aire que respiramos, especialmente en las grandes urbes en donde existe una gran concentración de personas.
Según la Agencia Europa del Medioambiente (AEMA) la contaminación atmosférica causa cada año 800.000 muertes prematuras en Europa, y acorta la esperanza de vida de los europeos en 2,2 años. La situación en el resto del planeta no es más halagüeña: La Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra las muertes provocadas por la polución del aire en 8,8 millones de personas al año, la mayoría de las cuales prematuras, que se producen por enfermedades cardiovasculares. Respirar aire contaminado provoca más muertes que el tabaco. De hecho, a nivel mundial, la contaminación del aire es ahora la quinta causa principal de muerte de entre todos los riesgos de salud, y se le atribuye el nueve por ciento de éstas.
Según un informe de Transport & Environment T&E (Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente), en la Unión Europea, los automóviles son responsables del 45% de las emisiones de CO2 del transporte, y su impacto sigue creciendo.
Efectivamente, el transporte urbano de superficie se efectúa principalmente mediante vehículos con motor de combustión interna. Estos generan, no solo dióxido de carbono -CO2– (pernicioso para la capa de Ozono), sino también grandes cantidades de óxidos de nitrógeno -NOX-, y otras partículas en suspensión (combustible no quemado en su totalidad que sale por el tubo de escape).
El NOX afecta directamente a la salud de las personas, el CO2 castiga al planeta, a la capa de ozono.
Siempre según AEMA en España, en el año 2019 se registraron unos 31.600 fallecimientos prematuros por NO2 y otras partículas nocivas.
El vehículo eléctrico es una gran oportunidad para reducir la contaminación del aire
En sus Conclusiones de junio de 2019, el Consejo Europeo instó a que se redoblaran esfuerzos para luchar contra el cambio climático y pidió a la Comisión que hiciera avanzar sus trabajos en pos de una UE climáticamente neutra, conforme a los compromisos adquiridos por la UE en virtud del Acuerdo de París. Así, el 11 de diciembre de 2019, la Comisión presentó su Comunicación sobre el Pacto Verde Europeo. Se trata de una nueva estrategia de crecimiento para la UE tendente a transformarla en una sociedad climáticamente neutra, equitativa y próspera, con una economía moderna, eficiente en el uso de los recursos y competitiva.
Para alcanzar el Acuerdo Verde de la UE, se necesitará que al menos el 40% de los coches vendidos en 2030 sean cero emisiones, y se deberá vender el último automóvil con motor de combustión en 2035.
Por su parte T&E, solicita a la Unión Europea y a los gobiernos, que las ayudas al sector de la automoción se condicionen al estímulo de las ventas de vehículos eléctricos, y pide el cese del desarrollo de nuevos motores de combustión, inversión en la producción de automóviles eléctricos, al suministro de baterías y al estímulo de la infraestructura de recarga.
De hecho, según datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente, un coche de gasolina de tamaño mediano emite de media unos 143 gramos de CO2 por kilómetro; y uno eléctrico de características similares (que utilice para recargarse el actual mix eléctrico medio de la UE) entre 60 y 76 gramos de CO2, es decir, entre un 47% y un 58% menos. En un híbrido enchufable, esta reducción es del 36%
El procedimiento de medición cambió con la implantación del protocolo WLTP (Procedimiento Mundial Armonizado para Ensayos de Vehículos Ligeros) el año 2018. Este nuevo sistema de medición sustituye al Nuevo Ciclo de Conducción Europeo (NEDC, por sus siglas en inglés).
A partir de los resultados de este protocolo, se prosigue a la homologación de los vehículos. Con la normativa Euro 6d (que entró en vigor el 1 enero de 2020 para las marcas y un año después para las ventas), el límite de emisiones de NOX para la gasolina será de 120 g/km, y de 90 g/km para el diésel; y se eliminarán las PM por completo.
Como vemos el vehículo eléctrico es una gran parte de la solución. Su fuerza motriz respecto de la energía consumida ofrece una eficiencia de más del 90%, es decir cada kW de su batería genera casi 1kW de potencia motriz en sus ruedas. El vehículo de combustión tiene un rendimiento de solo un 25%, es decir de cada kW de potencia del depósito de combustible aprovecha solo una cuarta parte para su tracción y encima contamina el aire (gases de escape).
El vehículo eléctrico se puede cargar con energías renovables
Según datos de la Agencia Internacional de la Energía, en el año 2050 entre el 50 y el 75 % de la electricidad tendrá origen renovable y la principal fuente de generación a nivel mundial será la energía solar fotovoltaica, con una previsión de 900 GW de potencia instalada en 2030 y 3.000 GW instalada en 2050, que generará 4.500 TWh/año de energía.
Por tanto, la energía eléctrica que vamos a cargar en las baterías del vehículo eléctrico viene en parte generada por energías limpias. Según el Balance 2020 de Red Eléctrica de España, el operador del sistema eléctrico nacional, las fuentes limpias de energía (el Sol, el agua, el viento, las olas, la biomasa) generaron en España el año pasado 110.577 gigavatios hora, el 44% de la producción total de electricidad.
Como vemos, el uso masivo y la recarga del Vehículo eléctrico ofrece una inmensa oportunidad de mejora de la contaminación del aire pues se puede cargar con energías renovables.
El sol y el viento ofrecen inmensas posibilidades de generar electricidad “limpia” y los vehículos eléctricos se podrían cargar en horas en las que “sobran” kilovatios limpios.
Un ejemplo de lo dicho anteriormente afecta a la energía eólica. Efectivamente, por la noche una gran cantidad de aerogeneradores (generadores de electricidad a partir del viento) se deben desconectar de la red eléctrica (a pesar de que sopla viento) porque no hay suficiente demanda de electricidad para mantenerlos en servicio. En cambio, se mantienen en servicio las centrales nucleares o las de ciclo combinado porque necesitan horas, o incluso días, para su parada y puesta en servicio).
Esta energía limpia “sobrante” podría cargar millones de vehículos eléctricos en lugar de desperdiciarse.
Las soluciones de recarga Circontrol abastecen diariamente 300.000 vehículos eléctricos
En Circontrol diseñamos y fabricamos soluciones para la recarga para cualquier vehículo eléctrico, en cualquier situación y lugar. Y nos sentimos participes y orgullosos de contribuir cada día a la mejora de la sostenibilidad de nuestro planeta, evitando emisiones de CO2 que empobrecen la capa de Ozono y de partículas en suspensión, nocivas para el sistema respiratorio de las personas,
Desde que fabricamos nuestro primer cargador en el año 2018 el electro movilidad ha avanzado.
Contamos ya con más de 100,000 puntos de recarga en todo el mundo, que cargan diariamente las baterías de unos 300,000 vehículos eléctricos. Estimamos que cargamos cada día unos 12 millones de kWh en combustible “eléctrico” en vez de gasolina (o gasóleo).
Los vehículos eléctricos cargados con esta energía eléctrica (en una gran parte “limpia”) recorren diariamente unos 60 millones de km “ecológicos” reemplazando más de 4 millones de litros de combustible tradicional, evitando diariamente unas emisiones de 4,000 t de CO2 y 7 t de NOX.
Conclusiones:
- La contaminación del aire en las ciudades es en gran medida provocada por el transporte y provoca la muerte prematura de 8,8 millones de personas al año, que se producen por enfermedades cardiovasculares
- El vehículo eléctrico es una gran oportunidad para reducir la contaminación del aire porque se puede cargar con energías renovables.
- Las soluciones de recarga Circontrol cargan diariamente 300,000 vehículos eléctricos en todo el mundo, reemplazando más de 5 millones de litros de combustible tradicional, evitando unas emisiones diarias de 4,000 t de CO2 y 7 t de NOX.