Las estadísticas indican que en Chile los pasajeros en general tienen un promedio de renovación de entre dos y tres años, lo que no quita que algunos usuarios –por el motivo que sea- tomen otra decisión y conserven más o menos tiempo la unidad.
Este tiempo estimado se corresponde con lo que generalmente dura la garantía, los créditos y otros instrumentos financieros que se desarrollan en el país que permiten facilidades en este lapso mencionado.
Teniendo en cuenta que los primeros vehículos 100% eléctricos comenzaron a rodar las calles chilenas durante 2017, llegando a fines de 2020 e inicio de 2021 apareció la intención de recambio y con ella una nueva unidad de negocio.
“Recién está naciendo el mercado de usados en términos de vehículos eléctricos”, cuenta a Portal Movilidad Francisco Medina, Gerente de Vehículos Eléctricos de Nissan Chile.
Por ejemplo, en el caso de Nissan, lanzó el primer modelo 100% eléctrico (Leaf) en 2017 con ventas acotadas principalmente enfocadas a flotas corporativas para conocer cómo se comportaba el producto en el país. En contemporáneo y en línea con el mercado, otras marcas lanzaron otros dos modelos.
Respecto a esta nueva unidad de negocio, indica: “Hay una oportunidad, dada la depreciación de los autos en el tiempo y porque en general todos estos usuarios le han hecho el mantenimiento adecuado, entonces en algunos casos aún están en garantía”.
El ejecutivo afirma que la principal duda de un usuario nuevo pasa por las baterías. No obstante, comenta que los usados disponibles hoy a la venta bordean los 50.000 kilómetros promedio.
Las unidades suelen contar con dos tipos de garantías: una del vehículo en general (suele ser la misma que sus convencionales) y otra para el pack de batería tiene con 8 años o 160.000 km al 80% de carga. Es decir, que los coches de renovación, en lo que refiere a baterías tienen aún un amplio margen de uso bajo la salvaguarda de la firma automotriz.
“Una persona que quiera comprar un vehículo eléctrico usado se está llevando uno que aun está en garantía y tiene muy bajo nivel de desgaste”, remarca Francisco Medina.
Asimismo agrega sobre otra ventaja: “El precio es de entre un 30% y 40% menos del valor original pero que aún conserva muchas de las características del vehículo cuando estaba nuevo”.
Cabe destacar que es difícil determinar las tendencias por las que irá este nuevo mercado teniendo en cuenta que hay pocos actores, los precios son altos y la situación económica tanto a nivel local como internacional.
El Gerente de Vehículos Eléctricos de Nissan Chile subraya: “La cadena tiene que aprender, está en proceso de crecimiento, que estén entrando al mercado de vuelta estos vehículos usados va a ayudar a que el mercado financiero aprenda que el vehículo no se deprecia tanto y tiene un mejor precio de reventa”.
Incipiente unidad de negocio en América Latina, pero con buenas repercusiones en Europa, de seguro se trata de un mercado que le va a dar movimiento a los vehículos eléctricos en la región.
Para concluir Medina afirma: “El mercado eléctrico ya no está en la curva de early adopters, ya está en la más fuerte de adopción, tuvimos un paréntesis por efecto pandemia, pero vemos con bastante optimismo al 2021 donde se van a sumar nuevos actores y va a dar más dinamismo”.