Como parte de su servicio “Charging as a Service” Engie desarrolló en Ciudad de México dos centros de recarga inteligente que cuentan con cinco cargadores rápidos en cada uno. Los cargadores están conectados a internet y a través de una plataforma de gestión se monitorean 24/7 para garantizar un 99% de disponibilidad de dicha infraestructura.

La empresa de capitales franceses llevó adelante el proyecto en seis meses, tiempo récord en comparación a lo que habitualmente lleva poner en marcha este tipo de infraestructura en el país.

Implicó la búsqueda los hub, estudios de factibilidad y elección de las locaciones, negociaciones con las administraciones de los edificios, instalación de los cargadores y monitoreo de la carga.

Francisco Cabeza, gerente de movilidad eléctrica de Engie México, brinda detalles a Portal Movilidad e indica: “Es el proyecto privado de infraestructura de carga rápida para vehículos eléctricos más grande de Latinoamérica”.

Cuenta con diez cargadores de 50 kW Efacec QC 45 con conectores CHAdEMO y CCS1 para una flota de más de 100 vehículos eléctricos que alcanzan el 80% de la recarga en 45 minutos.

Están distribuidos en dos hub de cinco puntos cada uno, con una plataforma de monitoreo 24/7. Con la particularidad que para uno de los estacionamientos se requirió de más de un kilómetro de cableadado para llegar al sótano nueve donde se instaló.

Estos espacios se convirtieron en centro de operaciones que le permite al cliente optimizar el tiempo que los vehículos no están circulando para ponerlo a punto previo a la reincorporación de la utilización como controles de mantenimiento o limpiado en seco.

“El cliente llegó con la información de una geocerca en el corazón de la ciudad donde iba a operar y con una proyección ambiciosa sobre el volumen de vehículos por cada ubicación. Fue adaptarse a las exigencias y con la necesidad de resolver en muy poco tiempo”, comenta Cabeza sobre el desarrollo.

En ese sentido, menciona que fue un reto en sí mismo, por tener que prestar una solución a una flota de más 100 vehículos que demandan mucha energía en muy poco tiempo por la necesidad del cliente de tener las unidades operando casi todo el día.

Con base en eso se empezaron a buscar locaciones, como estacionamientos y edificios, con la potencia ya instalada para minimizar costos de capacidad, distribución e infraestructura y reduciendo tiempos de trámites con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

“Cualquier incidente que surja se resuelve en el momento, algunos en minutos de manera remota y otra enviando personal al sitio. Desde un error en el protocolo de comunicación entre el vehículo y el cargador o que lo hayan conectado mal”, resalta el portavoz respecto a los beneficios de la gestión de carga integrada.

Como proyecto a mediano plazo ya se estudia el abastecimiento con energías de generación limpia dado que con el nivel de consumo se puede acceder al mercado eléctrico mayorista con tarifas preferenciales.

Plataforma de monitoreo de Engie