Ecuador | Infraestructura de Carga
lunes 26 de febrero de 2024
Ante la crisis. En Ecuador avanza venta de vehículos eléctricos pero solo se instalaron 2 puntos de carga
Si bien las ventas de vehículos eléctricos se triplicaron en el último año, la brecha con las estaciones de carga es cada vez mayor y no se llegan a satisfacer las demandas locales. A continuación, un panorama elaborado por Mobility Portal Latinoamérica.
ecuador estaciones de carga vs vehiculos electricos
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Pese a los desafíos económicos y sociales que enfrenta Ecuador, los vehículos eléctricos experimentaron un crecimiento notable en el último tiempo. 

Sin embargo, este avance se ve obstaculizado por la falta de una infraestructura de carga que acompañe esta evolución. 

Si bien existe una Estrategia Nacional de Electromovilidad Ecuatoriana (ENEE), donde uno de los ejes principales es el desarrollo de infraestructura de carga, los puntos de recarga y regulaciones siguen siendo una gran deuda pendiente.

Así lo señala, Genaro Baldeón, presidente de la  Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (AEADE), en diálogo con Mobility Portal Latinoamérica.

“Ecuador avanzó significativamente en la oferta de vehículos que requieren conexión a una carga externa – eléctricos e híbridos enchufables-, pero en la medida en que no avance paralelamente la infraestructura de carga ese mercado va a continuar creciendo lentamente en términos proporcionales”, expresa.

¿Cuántas estaciones de carga hay en Ecuador?

A partir de datos públicos, Mobility Portal Latinoamérica relevó los puntos de carga que se encuentran registrados en Ecuador.

Actualmente, en todo el territorio ecuatoriano se cuentan 94 puntos de carga.

Si tomamos como referencia un análisis del medio publicado en 2022, en aproximadamente dos años solo se sumaron 2 estaciones de carga.

En el caso de Quito, una ciudad con más de dos millones de habitantes, se registran 63 estaciones de carga, 48 pertenecientes a la región metropolitana.

Le siguen Guayaquil con 11 puntos y Ambato con 7.

Cuenca presenta 4 conectores, mientras que Cantón de Atacames e Ibarra tienen 3.

El resto se encuentra distribuido de a uno en Santo Domingo, Samborondón, Machala, Manta, Riobamba, Otavala, Saraguro, Sucre, Cantón Daule, La Troncal, Puerto López, San Miguel, Loja, Azogues y Santa Rosa.

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Eléctricos en auge: ¿Son posibles las inversiones en infraestructura de carga?

De acuerdo con datos proporcionados por AEADE, el país sudamericano triplicó las ventas de vehículos cero emisiones en tan solo un año.

El año 2023 cerró con un total de 1825 patentamientos de vehículos eléctricos, lo que representa un crecimiento del 314,8% con respecto al año anterior.

En este contexto, los vehículos híbridos también siguen creciendo: se registraron ventas anuales de 10.452 unidades.

A pesar de este auge en la adopción de vehículos eléctricos e híbridos, Baldeon sostiene que la infraestructura de carga en Ecuador sigue siendo insuficiente para satisfacer la creciente demanda

En ese sentido, una de las medidas más novedosas que estableció el nuevo Gobierno de Daniel Noboa es la creación del Fondo Nacional de Eficiencia Energética.

Este fondo está enmarcado dentro la Ley Orgánica de Competitividad Energética, que entró en vigencia el 11 de enero pasado y busca optimizar la gestión de recursos públicos relacionados con el sector eléctrico, tanto en el ámbito público como privado.

La iniciativa plantea que se podrá financiar a empresas o personas que puedan incorporar equipos eficientes en sus casas y empresas. 

Ahora bien, ¿se lograrán inversiones ante la falta de regulación y normativas de electromovilidad?

Para Baldeón, la medida “podría promover a la infraestructura de carga, pero todavía el nivel de recursos que puede tener ese fondo no es claro”, lo que deja en evidencia que “serían insuficientes para alcanzar objetivos razonables en términos de inversión pública”.

Según indican de manera oficial, el Fondo será financiado por programas de recambio de equipos ineficientes por eficientes, asignaciones no reembolsables, créditos que se otorguen en un contexto de cooperación nacional e internacional y la contribución por vehículos particulares de motor de combustión interna.

“El proceso va a ser largo todavía porque no tenemos las regulaciones ni tampoco un mercado suficiente como para empezar a tener inversiones privadas que sean las que impulsen esta infraestructura”, advierte.

 

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