En el marco de días claves para la interna del oficialismo, el excanciller y aspirante a la presidencia por el partido Morena, Marcelo Ebrard, ubicó a la electromovilidad en el centro de su plan económico.

“¿Cómo hacemos una nueva economía? Tenemos que crear un sistema de electromovilidad en el país, atender al agua y la expansión de las energías limpias”, indicó el referente.

Y sumó: “Tenemos que invertir en tecnología y capacitación para ello. O hacemos esto o no creceremos”.

Ebrard indica que su plan apunta al crecimiento del 5% en la economía del país.

Promesa de campaña de Ebrard: la mitad de los vehículos serán eléctricos a partir del 2030.

El exsecretario de Relaciones Exteriores augura que “afortunadamente” existe la posibilidad de un “nearshoring a gran escala”.

Vale recordar que en la gestión económica del presidente Andrés Manuel López Obrador, se instituyó a la electromovilidad como una de las cinco industrias a relocalizar en el país.

Este proceso, además de acortar las distancias de la cadena de proveeduría, ubica a México como un productor necesario para la transición hacia energías limpias que busca impulsar Estados Unidos.

En ese sentido, México, según la Alianza Mx de la Universidad de California, destina un 90% de lo producido al mercado estadounidense.

Por otra parte, el país contará con la efectivización de inversiones como la de Tesla y BMW; asimismo empresas chinas y europeas apuntan a producir vehículos eléctricos o componentes en distintos puntos del país.

Planes de infraestructura: otro punto para la presidencia mexicana

Ebrard indica como punto necesario para el desarrollo económico del país la inversión en infraestructura.

En ese sentido, vale destacar que la gestión oficialista apoya su balance en torno a dos puntos principales en esta materia: el corredor interoceánico y el Plan Sonora.

Marcelo Ebrard,  el la inauguración de la planta fotovoltaica del Plan Sonora, antes de su lanzamiento como candidato a la presidencia.

Ambos guardan como punto común la búsqueda de inversiones en electromovilidad.

Por un lado en la entidad norteña y fronteriza, se espera la producción de energías limpias para un total de 5 GW anuales, los cuales se quieren llevar a 8 GW.

A su vez, se sostiene la intención de explotar el litio subyacente en el suelo. A estos fines se nacionalizó el mineral y se creó una empresa estatal para gestionarlo.

A pesar de las gestiones, aún no se registran avances en la materia.

Actores de la industria de las baterías consideran que el proceso de obtención del mineral para la producción en el país podría llevar entre cinco y diez años.

Ese plazo se corresponde al estudio de costos, a la obtención de la tecnología, las inversiones correspondientes y a su vez la transformación del litio en celdas.

Por su parte, el corredor interoceánico Istmo – Tehuantepec apunta a construir diez polos industriales conectados por vías ferroviarias e inversiones portuarias.

Cada uno de esos terrenos será de aproximadamente 300 hectáreas y contará con beneficios fiscales.

Según información oficial, el paquete está conformado por depreciación acelerada durante los primeros seis años, así como exención del IVA en transacciones al interior de los polos y entre estos durante los primeros cuatro años.

A su vez incluye la exención del total del Impuesto Sobre la Renta (ISR) durante los primeros tres años, con posibilidad de extenderse por tres años adicionales con una reducción de hasta el 90%, en función de variables como número de puestos de trabajo creados.

A su vez, el presidente precisó que este proyecto será inaugurado a más tardar en septiembre de este año.

Electromovilidad y empleos: la promesa de Ebrard

Para arribar a ese 5% de crecimiento anual y llevar adelante la transformación económica incluyendo a la movilidad eléctrica y a las energías renovables, el aspirante a la presidencia propone:

“Necesitamos que, si esto se da, dupliquemos los salarios. Ese es un objetivo igualmente importante que crecer porque si creces al 5% y los salarios se estancan es una injusticia porque no puede haber crecimiento sin productividad”.

Y suma: “Se deben crear en México seis millones de empleos bien pagados. Es el primer objetivo de México en estos años por venir”.

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