Durante el Foro Legislativo de Movilidad Sostenible y Agenda 2030 en Argentina, las palabras de Peter Neven, ministro de la República Federal de Alemania, sobre el cambio climático y la urgencia de actuar en consecuencia, resonaron fuerte.
Es que, en contrapunto a la visión política del Gobierno de Javier Milei, Neven destaca la necesidad de la intervención estatal para impulsar la transición hacia la electromovilidad.
«Si el Estado no se involucra va a costar mucho la transición energética», afirma en sintonía con la importancia de una estrategia gubernamental integral. Y agrega: “No podemos tomarnos 100 años porque será tarde para el cambio climático”.
El ministro alemán enfatiza la urgencia de metas claras, normativas adecuadas, incentivos fiscales y el impulso al desarrollo tecnológico para acelerar la adopción de vehículos eléctricos y combatir el cambio climático.
Alemania, con su compromiso de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 65% para 2030 y alcanzar la neutralidad climática para 2045, se posiciona como un caso de éxito en materia de transición energética
En esa línea, destaca que el sector energético, con un 40%, y el transporte, con un 20%, son los principales contribuyentes a la contaminación.
Podría decirse que Alemania da pasos firmes. Actualmente, el 50% de la electricidad proviene de fuentes renovables, mientras que la meta para 2030 es elevar este porcentaje al 80%.
Sin embargo, es importante destacar que algunas industrias quedan por fuera de estas medidas, como la industria pesada, la siderurgia y partes del sector de transporte.
Para estos, el ministro alemán resalta la importancia de la estrategia de hidrógeno verde.
«Argentina tiene todas las oportunidades para convertirse en el próximo Arabia Saudita por el potencial de producción de hidrógeno verde», revela Neven sobre el potencial del país para liderar la revolución energética.
De esa manera, queda clara su convicción sobre que el hidrógeno verde transformará las cadenas de suministro energético a nivel mundial.
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¿Qué acciones concretas tomó Alemania para el avance de la electromovilidad?
Mobility Portal Latinoamérica formó parte del debate en el que Peter Neven desarrolló los casos de éxito de su país.
Para el sector de vehículos, Alemania apuesta por el concepto de movilidad eléctrica para los autos de transporte liviano y por el hidrógeno para el transporte pesado.
En cuanto a la estrategia para promover la transición a vehículos eléctricos, Neven comenta que en el sector del transporte tiene la meta de reducir las emisiones un 50% hasta 2030.
“Para llegar a esta cifra tenemos que tener 15 millones de autos eléctricos en el mercado alemán”, explica.
Y señala: “Para poder mantener una flota tan importante se estima que requeriremos como un millón de estaciones de carga públicas y accesibles”.
Para llegar a dicha meta, el Gobierno alemán tomó una serie de medidas para liderar el movimiento.
Algunas son normas para la licitación pública, junto con subsidios impositivos y directos para actores que instalan estas estaciones de carga.
Vale destacar que Alemania impulsó una política de subsidios para la compra de autos eléctricos, lo que contribuyó a un aumento significativo en la demanda, aunque desde diciembre del año pasado ya no lo implementan.
“Sin el apoyo del Estado todo este impulso e incremento no se habría dado”, afirma.
Durante los incentivos, el país experimentó un fuerte crecimiento en la demanda de vehículos eléctricos y los números se triplicaron en cuestión de un año.
Neven sostiene que ese incrementó se relaciona al subsidio al consumidor que compra un vehículo 100% eléctrico y al avance de la tecnología que permite desplazarse por todo el país sin inconvenientes.
Además, uno de los desafíos para Alemania es el abastecimiento de productos necesarios para la producción de coches eléctricos, especialmente las baterías.
En este sentido, resalta la construcción de la planta de baterías más grande en el país hasta la fecha, un proyecto que marca un avance en la producción local.