Sharon Mustri, analista de BloombergNEF, afirmó que por ahora, ningún país de la región de América Latina, excepto Brasil, se encuentra en los primeros 15 lugares de naciones participantes en la cadena de suministro de materias primas para la elaboración de baterías con base en litio destinadas a los vehículos eléctricos.
En esa lista, los tres primeros lugares son ocupados por China, Japón y Corea del Sur, con Brasil en el puesto número 12.
De acuerdo con Mustri, Argentina y Chile tienen también gran potencial por los yacimientos que contienen.
“América Latina a nivel de litio es extremadamente importante y está haciendo un papel cada vez más importante”, consideró la analista, dado que en la zona hay cada vez más capacidad de minas y de productos refinados para su obtención, además de mayor innovación.
Sin embargo, aclaró que al margen de la extracción de los metales necesarios para la elaboración de las baterías, pasar a la manufactura requiere que América Latina cubra otros factores, entre ellos, convertirse en un centro de demanda.
“Nosotros no creemos que la inversión para manufactura va a llegar a lugares que no están cerca de centros de demanda”, destacó Mustri.
Otro punto que no tiene la región, agregó, es la experiencia y el conocimiento para desatar manufacturas a nivel de los materiales tanto para la elaboración de las baterías, como de los vehículos eléctricos. “Todavía no se hace aquí y no hay ese nivel de conocimiento que lo haga un lugar lógico para centrar muchos de estos procesos que son muy difíciles y que hoy en día todavía estamos tratando de mejorar”, apuntó.
En este sentido, destacó la importancia de los gobiernos locales, más allá de las administraciones federales, para atraer la inversión extranjera. “En Argentina los gobiernos a nivel estatal se han involucrado más con la producción de litio y con la cadena de suministro en general”, ejemplificó durante su participación en el webinar “El futuro de las baterías de ion de litio y sus metales en Latinoamérica”.
Refirió que a nivel mundial, el mercado del litio estaba en situación complicada porque había mucha oferta y poca demanda, haciendo incosteable su extracción y producción, lo que llevó a varias minas a cerrar.
Asimismo, previó que en el periodo 2021-2022 potencialmente habrá escasez de este elemento, pero en Estados Unidos y Canadá se está extrayendo incluso de yacimientos no convencionales a costos accesibles.
En cuanto al reciclaje de las baterías, Mustri explicó que los materiales al interior de estos elementos son altamente reciclables, pero remarcó que los autos eléctricos requieren de baterías de alto rendimiento, por lo que cuando éstas ya no alcanzan ese nivel, pueden tener una “segunda vida” en otros usos.
“Hoy en día no vemos el reciclaje como parte de la oferta global de estos metales y la razón es que todavía no tenemos suficientes baterías que ya acabaron con su primera vida, o su segunda vida, y llegaron a un punto en donde se puedan reciclar”, anotó a la vez que previó que para 2030, en el caso del litio, hasta 10% de la oferta total del mercado provendrá de material reciclado.