A continuación un balance de la industria de vehículos eléctricos en un año de pandemia:
Actualmente, Tesla lleva una capitalización del mercado por encima de los 600 mil millones de dólares, valiendo más que las cinco principales empresas en la industria automotriz. Este éxito ha marcado al 2020 como uno de los mejores para la industria de los vehículos eléctricos, marcando un auge para las startups, permitiéndoles avanzar en su modelo.
Si bien el mundo ya estaba apostando por utilizar vehículos híbridos o 100% eléctricos, nadie se esperaba que la empresa de Elon Musk alcanzara el récord en operaciones frenéticas antes del S&P500. Los inversores han notado el cambio en la industria y empezado a destinar recursos a startups que ya se encontraban estancadas en su desarrollo o prácticamente en crisis.
XPeng y Nio en China, así como Canoo en California son un buen ejemplo de startups que recibieron una inversión importante por parte de otras empresas quienes notaron el potencial del producto. Xpeng ha exportado casi 5,300 vehículos en el año, entrando en nuevos mercados fuera del asiático al enviar autos a Noruega.
Nio es un caso especial, tan sólo en 2019 ya no tenía planes de tener su propia fábrica así que apoyaba en manufactura a otras. Luego de una inversión por parte de Alibaba en 2020 es la segunda más exitosa en todo el mundo recaudando 2.6 mil mdd, XPeng es la tercera con 2.2 mil mdd.
Incluso ante la crisis económica derivada de la pandemia por Covid-19, las inversiones se dieron a empresas alrededor del mundo, principalmente en China y Estados Unidos. La industria de motores de combustión interna (ICE, por sus siglas en inglés) ya parece obsoleta para una parte importante de la población y del sector económico-empresarial.
A este cambio en los mercados se añade el factor social, donde activistas y ciudadanos exigen con más ahínco la producción de vehículos eléctricos y su aceptación por el gobierno. Autos ICE son vistos como parte del problema al tratar de disminuir los gases de efecto invernadero en el mundo para cumplir con los Acuerdos de París. Algunos gobiernos inclusive tienen planes de regular o prohibir la venta y producción de vehículos ICE para 2030.
Los expertos prevén que la creciente industria de vehículos eléctricos sólo siga aumentando su producción y progresando a partir de 2021. Queda por ver si la legislación de cada país puede seguir los pasos agigantados de Tesla y otras startups en el mercado, aunque es seguro el ambiente se beneficiará de esto.
Así lo indica el medio Notipress.