Finalmente, como había adelantado Portal Movilidad el año pasado, Guayaquil lanzó una licitación de buses que incluye unidades eléctricas como requisito excluyente para participar. Hay tiempo de presentar propuestas hasta el 11 de julio a las 14 horas y se estima que la adjudicación se anunciará el 29 de julio. 

El concurso está dirigido a la operación del servicio público de transporte de pasajeros en la troncal 3 del sistema Metrovía, es decir, el Bastión Popular – Centro y sus rutas alimentadoras. 

¿Qué condiciones se exigen? La flota mínima para la troncal debe estar compuesta por 34 buses articulados eléctricos, mientras que aquella presentada para las alimentadoras debe incluir 30 vehículos, diez de ellos cero emisiones. En el último caso, las restantes pueden ser unidades a combustión nuevas o usadas, de un máximo de cuatro años de fabricación.

Asimismo, se aclara que el operador está obligado a incorporar en el cuarto año de operación cinco buses articulados eléctricos y seis buses alimentadores, y al séptimo año deberá proveer otros cinco articulados eléctricos y seis alimentadores más. 

De esta manera, se completará la flota requerida de 44 buses articulados eléctricos y 42 alimentadores. Este proceso se llevará adelante en la medida que exista un incremento de la demanda que justifique la suma de unidades para el servicio de transporte, debidamente sustentado mediante un informe técnico con la proyección de un incremento de pasajeros.

Los vehículos que cumplirán su operación en la troncal deben ser de 15 o 18 metros y poseer una capacidad de 160 pasajeros. En el resto de las rutas rodarán unidades de 12 metros que permitan la movilidad de 80 personas. 

Además, es necesario que el operador contemple la infraestructura de carga para los buses eléctricos. 

Aquellas ofertas que cumplan integralmente con los parámetros mínimos pasarán a la etapa de evaluación con puntaje, caso contrario serán descalificadas. 

De esta manera, Guayaquil continuaría llevando la delantera en materia de electromovilidad en el país y cumpliría uno de sus objetivos más importantes:  reducir las emisiones de dióxido de carbono a través del uso de energía limpia para la operación de las unidades de transporte. 

Cabe recordar que desde marzo de 2019 la compañía Saucinc, que opera la línea 89 entre el norte y centro de la ciudad, inició los recorridos de 20 unidades eléctricas. Un hito para el transporte urbano en el territorio. 

La inversión total había sido de 8 millones de dólares, de los cuales 7,6 millones correspondieron a un crédito otorgado por la Corporación Financiera Nacional (CFN) dentro de su línea de Financiamiento para Movilidad Eléctrica que sirvió para pagar 18 unidades.