Recientemente, tal y como se asegura desde el prestigioso medio estadounidense The New York Times, se conoció que las transmisiones AM comienzan a ser eliminadas de algunos coches eléctricos, como sería el caso de los fabricados por BMW, Tesla, Volkswagen, Audi, Porsche y Volvo.
El problema reside en que estos vehículos generan más interferencias electromagnéticas y, por tanto, pueden interrumpir la señal AM, menos resistente que la FM. BMW, en un comunicado publicado en el medio anteriormente mencionado, afirma que: «Mejor que frustrar a los clientes con una recepción peor y ruido de fondo, la decisión es eliminar esta opción en los vehículos con tecnología eDrive».
Ford parece que se unirá pronto al club y es que esta es sólo la punta del iceberg. Es verdad que las interferencias son considerables, pero éstas pueden ser salvadas con una distribución diferente de los componentes eléctricos, con cables mejor preparados y con algunos filtros.
La realidad es que, según retoma Mundo Deportivo, los fabricantes optaron por la eliminación de la frecuencia AM debido al coste que supondría tener que realizar estas modificaciones, teniendo en cuenta la guerra de precios que se avecina en un sector en auge en el mundo del motor.
Según el diario digital, parece que hasta 47 millones de estadounidense escuchan de manera habitual la radio AM, lo que supondría casi un 15% de la población del país. El cambio podría ser drástico para muchas personas, pero sobre todo para aquellas cadenas que transmiten en dichas ondas.
Diane Newman, gestora de WWL en Nueva Orleans, asegura que durante el desastre del Katrina las radios fueron fundamentales para que la población estuviese conectada con los servicios de emergencia. En sus declaraciones afirma: «No había Wi-Fi. No había conexión por teléfono. Quitas las radios AM en los coches y quitas la cuerda de salvamento, una conexión cuando la comunidad más te necesita».