Semanas atrás, el pleno de la industria automotriz advirtió la contradicción que implica el fomento de la entrada de vehículos ilegales en el país, que retrasan el parque vehicular y contaminan el medio ambiente, a la vez que se busca desarrollar la movilidad eléctrica. 

Pese a las críticas, el Gobierno redobló la apuesta y aumentó el descontento del sector: el jefe del Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador, emitió un decreto en el Diario Oficial de la Federación, donde sumó dos entidades a las diez donde se tenían permitido regular estas unidades, además de ampliar el plazo efectivo del 20 de julio al 20 de septiembre de 2022.

El primer decreto tiene efecto en los estados de Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila de Zaragoza, Durango, Michoacán de Ocampo, Nayarit, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas. Ahora se suma Sinaloa y Zacatecas.

Además de los efectos ambientales, las organizaciones del sector reprocharon que esto representará un nuevo golpe a la industria. De hecho, podrían dejar de comercializarse 200 mil vehículos, es decir, cerca de un 20% de la venta anual que realizan las empresas instaladas en el territorio.

Según la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) este tipo de decisiones no tiene correlación con las políticas que vienen tomando las autoridades nacionales, como las alianzas estratégicas con Estados Unidos que apuntan a la electrificación del transporte. 

De hecho, AMDA presentó al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, un documento en el que llama la atención sobre las problemáticas que implica avalar esta clase de decisiones y propone coordinar un proyecto integral de movilidad. 

“Es importante incentivar la renovación vehicular de la flota obsoleta. No podemos perder de vista que el objetivo principal es avanzar en la disminución de las emisiones globales. La electromovilidad no es un asunto de ponernos a la moda, es un objetivo ulterior de disminuir el impacto ambiental”, sostuvo Guillermo Rosales Zárate, presidente de AMDA, en conferencia de prensa.

Luego, agregó: “El grupo de alto nivel de líderes de América del Norte no puede voltear la cara y no darse cuenta de los perjuicios que genera para el mundo, la región, y particularmente para México, donde nos quedamos con el basurero automotriz desechado por el mercado norteamericano”. 

Los “autos chocolate” en México

Cabe recordar que, en enero, el Gobierno mexicano publicó el decreto por el cual se regularizan los llamados “vehículos chocolate” en, por ese entonces, diez estados del país. Se trata de automóviles, esencialmente, usados y de procedencia extranjera. Dicha disposición entró en vigencia hasta el 22 de julio del año en curso, hasta ser modificada por la última decisión del presidente.