La compañía Electromobility & Energy tiene como objetivo próximo instalar cuatro estaciones de carga rápida para vehículos eléctricos en Cuenca, meta que planea extender y ampliar al resto del país hasta llegar a los 20 puntos.
Asimismo, pese a las dificultades que representan las condiciones actuales de venta de energía, la firma debió encontrar un plan que vuelva el negocio rentable.
“Tenemos planificado iniciar las instalaciones en el primer trimestre del 2022. Estamos trabajando en ello todos los días, aunque no es nada fácil”, indica Xavier Cherrez, gerente de la empresa, a Portal Movilidad.
Y agrega: “En algunos parques de Guayaquil, estamos intentando aplicar a las licitaciones para también contar con infraestructura de carga allí”.
En noviembre de 2019, Electromobility & Energy instaló el primer punto de carga abierto al público en la ciudad de Cuenca, de donde es oriunda la compañía, el cual fue diseñado y construido en la propia casa de Cherrez.
Tras aquel proyecto, hoy la empresa se encuentra en una etapa de socialización del nuevo plan de cargadores en diálogo con el Gobierno local para definir dónde se instalarán los cuatro puntos en cuestión, a la vez que planea una plataforma que permita una recarga inteligente. Igualmente, en septiembre instalará un punto de carga lenta en la ciudad.
“Lo que hemos visto con mucha preocupación es que algunas empresas que adquieren la infraestructura de carga piensa que simplemente se trata de comprar la estación y ya. No obstante, se necesitan muchos actores y requerimientos para poner en marcha estos sistemas”, advierte Cherrez.
Luego, añade: “Por eso, nosotros también venimos trabajando con un equipo multidisciplinario para desarrollar la plataforma de manejo de las estaciones y un sistema de cobro”.
Respecto a esto último, Cherrez asegura que no es una tarea sencilla hacer de este un negocio rentable, teniendo en cuenta cómo se comercializa la energía en el país.
Según el gerente, no solo deben pagar por la energía consumida sino también por la potencia demandada de la misma, lo cual no le genera demasiados beneficios teniendo en cuenta el escaso número de vehículos eléctricos en el territorio.
Al respecto, explica: “Nosotros hemos buscado cómo manejar el modelo de negocio para que se puedan compensar estos costos a largo plazo. En ese sentido, todos los actores nos dan un aporte. Hemos vendido la mayoría del proyecto para poder contar con el respaldo suficiente de todos ellos, de manera que se puedan sostener los valores a lo largo del tiempo”.
Asimismo, Cherrez destaca que se trata de una iniciativa privada, dado que en Cuenca desde el lado público aún no se está trabajando en un plan que promueva la electromovilidad. Es por eso que para la empresa su papel juega un rol fundamental en esta promoción.
“Actualmente no existe un proyecto sobre dónde instalar los puntos de carga, por ejemplo. Entonces espero que, con el trabajo que estamos haciendo nosotros, nos permitan hacer uso de los espacios. Es muy importante todo lo que estuvimos haciendo para lograr que la gente se familiarice con la movilidad eléctrica y no se presenten tantos obstáculos”, cierra Cherrez.