El Gobierno uruguayo continúa con el proceso de selección de proyectos de hidrógeno verde en el Fondo Sectorial, con el objetivo de respaldarlos económicamente.
¿Cuáles han sido los avances hasta el momento? Flavio Caiafa, presidente de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), afirma a Portal Movilidad que aún restan algunas reuniones más para elegir al “ganador”. Asimismo, asegura que el transporte es protagonista de varios planes.
“De los diez proyectos, cerca de la mitad incluye al transporte con celda de hidrógeno, energético clave para descarbonizar al segmento”, destaca Caiafa durante el Congreso LATAM Renovables.
Cabe recordar que se brinda financiamiento y apoyo a la construcción, producción y uso de Hidrógeno Verde y sus derivados, como podría ser a través del transporte de carga pesada o buses.
También están incluidos aquellos planes relacionados al e-metano, e-kerosene, fertilizantes verdes y mezcla con gas natural.
El llamado, que estuvo abierto hasta el 24 de mayo, consideraba distintas posibilidades en cuanto a fuentes de energía renovable, escala y localización. La escala mínima del proyecto es de 1,5 MW de potencia en el electrolizador.
Este podrá ser considerado como la fase inicial de un proyecto escalable en una siguiente etapa y se administra bajo la modalidad de concurso, en dos partes: presentación de perfiles y del plan.
“Ya se dieron a conocer los perfiles. Nos vamos a reunir para recibir un informe por parte de los técnicos, quienes nos van a dar sus sugerencias para realizar la selección. El comité de agenda es el que toma la decisión final”, adelanta Caiafa.
Y agrega: “Se premian o se priorizan los proyectos que se implementen más rápido. Estos deberían estar funcionando como máximo en diciembre de 2025”.
El apoyo será de hasta USD 10 millones en la modalidad de financiamiento no reembolsable. El beneficio adjudicado será distribuido en un plazo no superior a 10 años desde el inicio de la operación de la planta.
Es decir, no se brindará apoyo financiero durante la etapa de instalación de la planta y obra y los aportes serán transferidos al beneficiario anualmente y en función del cumplimiento de hitos preestablecidos.
“La idea es que el piloto sea una operación productiva, que genere la energía verde o que la tome de la red, que haga la electrólisis y explote el hidrógeno. Si el proyecto incluye el uso de una flota, también tiene que ver cómo abastecer a los vehículos. La idea es que después se genere un retorno”, explica el directivo.
Luego, añade: “Lo que aporta el fondo es la diferencia entre el retorno que recibe por la operación del proyecto y los costos”.
En función del resultado de una evaluación realizada por el Comité de Agenda, se seleccionarán los perfiles que se ajustan a las bases de la convocatoria, a quienes elegirá para presentar los proyectos en un plazo estipulado.
El Comité de Agenda podrá definir si otorgará apoyo a más de uno, pudiéndose otorgar montos menores a los solicitados.