Siendo una realidad que la pandemia no ha remitido del todo y si bien no se han vivido nuevos confinamientos, la incertidumbre y la crisis económica continúan a la orden del día la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) entiende que la industria automotriz continuó y continuará viéndose afectada.
No solo hoy en día el contexto se ve afectado por ello, sino que también la falta de microchips a nivel global, una materia prima indispensable para los vehículos digitalizados, atenta a las previsiones. De esta manera, se han provocado fuertes reducciones en la producción y una notable falta de stock.
Frente a esta realidad, el director general de ANFAC, José López-Tafall, pone plena confianza en que la transformación de la industria y la recuperación serán los dos focos de trabajo para el 2022.
Es así, que en este proceso el “El PERTE para el coche eléctrico será clave y por ello trabajaremos para que el reparto de estos fondos sea eficaz, ágil y contribuya a la competitividad de la industria de la automoción y del ecosistema de la movilidad”.
Durante este 2021 la demanda de vehículos electrificados ha crecido exponencialmente, convirtiéndose en una verdadera alternativa de compra para buena parte del mercado.
“Si realmente lo que nos preocupa es la descarbonización, y no implantar una determinada visión de la sociedad, no podemos olvidar que los vehículos que más contribuyen a la contaminación y al exceso de emisiones de CO2 son los más antiguos. Tenemos que empujar la renovación del parque automovilístico español, que ya supera los 13 años de antigüedad”, aseguran.
Pese a esto, desde la organización reconocen que hay que hacer mucho más como sociedad si se desea mantener una posición competitiva.
Planes de ayuda como el MOVES III y los fondos para la transformación toman un papel protagónico, pero siempre y cuando se implanten de forma ágil y sencilla para alcanzar de verdad al mercado y las empresas.
A su vez, las mismas deben estar acompañadas de herramientas transversales de apoyo a la demanda, renovación del parque, incremento del despliegue de infraestructuras de recarga para vehículos electrificados de acceso público y una fiscalidad al uso si somos coherente con los objetivos medioambientales que nos fijamos como país.
Por lo tanto, el año pasado ANFAC ha creado nuevas herramientas que fomentan la innovación dentro de la industria:
- Fijar objetivos vinculantes de despliegue de infraestructura de recarga de acceso público
- Reconocimiento de interés estratégico nacional para proyectos de despliegue de infraestructuras de recarga pública de alta potencia (+250 kW)
- Actuaciones para incrementar el número de puntos de recarga de acceso público interurbana a corto plazo
- Desarrollo complementario o adicional a la declaración de utilidad pública (+250 kW)
- Incentivar el despliegue en autopistas y autovías de la Red General de Carreteras del Estado
- Transparencia de la capacidad de consumo de la red de distribución
- Marco regulatorio local claro y simplificado
- Promover infraestructuras de recarga inteligente de los vehículos eléctricos en los aparcamientos de los edificios
- Ayudas a la implantación de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos
- Beneficios fiscales de carácter temporal en el Impuesto Especial sobre Electricidad
- Flexibilización temporal de los costes fijos en puntos de recarga pública
- Inclusión de proyectos de potenciamiento de la infraestructura de recarga en los planes de inversión anuales y plurianuales de las distribuidoras eléctricas
- Registro de puntos de recarga de acceso público
14.Facilidades para el pago en los puntos de recarga de acceso público (interoperabilidad)
- Transparencia de costes en la factura para evitar riesgos de arbitraje de precios
- Mantenimiento de los puntos de recarga pública y aseguramiento de la operación.