El panorama en el 2024 tras la reducción y eliminación de los incentivos proporcionados por el gobierno federal para promover la transición a la eMobility en Alemania podría tener consecuencias en la adopción de vehículos eléctricos.

“El cambio hacia la movilidad eléctrica en el país se produce a un ritmo notablemente lento ”, afirma Anja Zeller, portavoz de política de transporte de VCD Hessen eV, en conversación con Mobility Portal Europe.

En 2023, la nación registró un total de 609 camiones eléctricos pesados , lo que representa un aumento del 256,1 por ciento en comparación con el año anterior, mientras que se registraron 2.169 eTrucks , lo que refleja un aumento del 169,8 por ciento .

Según datos de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles(ACEA), se registraron 835 eBuses, lo que representa un crecimiento del 29,3 por ciento en comparación con 2022.

En cuanto a los Vehículos Eléctricos de Batería (BEV) , el año concluyó con un total de 524.219 unidades matriculadas, lo que refleja un alza del 11,4 por ciento, sobre la meta de 15 millones que el país debe alcanzar al 2030.

Sin embargo, a pesar de este crecimiento, Zeller sostiene que a pesar de que China lidere la transición, es posible que otras naciones asuman la posición de liderazgo que ocupa Alemania este año.

Esto, a su vez, podría impactar la posición de la Unión Europea en esta progresión, especialmente considerando los datos de matriculación de 2023, donde las ventas de eCar en diciembre disminuyeron por primera vez desde abril de 2020 , durante la pandemia de COVID-19.

Las matriculaciones cayeron un 16,9 por ciento, hasta 160.700 unidades, y según ACEA, esta caída puede atribuirse a un desempeño comparativamente sólido en diciembre de 2022, así como a una desaceleración significativa en Alemania ( -47,6 por ciento ), el mayor mercado para esta fuente de energía.

A pesar de esto, el volumen total durante todo el año pasado superó los 1,5 millones de unidades , lo que refleja un aumento sustancial del 37 por ciento en comparación con 2022, con una participación de mercado de BEV que alcanzó el 14,6 por ciento.

El sector de camiones y autobuses eléctricos también creció con Alemania a la cabeza.

Este año ya es otra historia.

Recientemente, el Ministerio Federal de Digitalización y Transportes (BMDV) ha concedido las convocatorias finales de financiación para autobuses con propulsión alternativa.

Así, se destinarán 53,4 millones de euros a 11 empresas y dos distritos del país para la adquisición de un total de 186 vehículos e infraestructuras asociadas.

Sin embargo, según informa Electrive, el gobierno ya no financiará eBuses ni eTrucks .

Los proyectos que ya hayan sido aprobados seguirán estando totalmente subvencionados.

Debido a la consolidación presupuestaria y la priorización de inversiones, no todos los programas de financiación pueden mantenerse según lo previsto.

No sólo eso, sino que en diciembre de 2023, el ministro alemán de Economía, Robert Habeck, anunció el fin del bono medioambiental para la compra de vehículos eléctricos tanto para empresas como para particulares.

En consecuencia, según las últimas cifras publicadas por la Autoridad Federal de Transporte por Carretera (KBA), en lo que va de 2024 se han vendido 49.953 BEV, un 1,3% menos que en el mismo período de 2022.

Pese a ello, los fabricantes alemanes han tomado la iniciativa y han optado por reducir los precios de sus modelos eléctricos , por lo que el mercado ajusta sus precios cuando desaparecen las subvenciones.

Hace apenas unos días, Thomas Schäfer , director ejecutivo (CEO) de la marca Volkswagen , anunció planes de lanzar un eCar que costará 20.000 euros.

Entonces, ¿se necesitan incentivos para seguir impulsando la transición?

“En principio, la conversión debería realizarse sin subvenciones . Los concesionarios ya han respondido con sus propios descuentos”, afirma Anja Zeller.

Y explica: “Los aspectos positivos de la transición también deberían valorarse monetariamente e incluirse en el precio”.

En este sentido, ¿está haciendo el gobierno alemán todo lo necesario para alcanzar el objetivo de cero emisiones marcado por la Unión Europea?

Según Zeller, la respuesta es un rotundo no.

Para fomentar este cambio, “ se necesitan decisiones políticas precisas que brinden claridad a los fabricantes ”.

Además, es esencial promover la expansión de la infraestructura de carga, implementar límites de velocidad, eliminar privilegios para los conductores de automóviles y aumentar la promoción del transporte a pie y en bicicleta.

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