A diferencia de países europeos y norteamericanos, Latinoamérica destaca en el mundo de la electromovilidad por el auge de sus buses eléctricos y, en parte, esto se debe a la apertura comercial indiferente entre compañías asiáticas y de Occidente. 

En este sentido, según Pedro Giraldo, BDM Gobierno Latam de Geotab, si bien esta incorporación indiscriminada de unidades favorece al crecimiento del transporte público eléctrico, la realidad demuestra también que la variedad de estándares de “big data” que cada compañía brinda sobre el rendimiento de sus productos genera dificultades de entendimiento en el operador. 

“En Latinoamérica, somos más abiertos a que estos fabricantes entren, pero entonces se vuelven un mundo difícil de manejar a veces porque es muy variado. No hay algo que obligue a que estos fabricantes entreguen la información de una u otra manera”, advierte Giraldo durante el último Especial del año organizado por Portal Movilidad. 

Y agrega: “Cada marca es un universo diferente y es bastante complejo soportar esta variedad. Los buses eléctricos vienen con estándares muy distintos, sobre todo los de fabricantes asiáticos. No transmiten los datos de maneras iguales. Al tratar de extraer datos de un bus de estos hay que hacer un proceso de ingeniería”. 

Esto, en consecuencia, tiene efectos negativos en el estudio de los datos posibles de extraer sobre la productividad de las unidades eléctricas para quien las compra y, por lo tanto, no aprovechar los ahorros de costos a los que da paso la telemática.

Siguiendo esta línea, Giraldo propone una exigencia unificada por parte de todos los actores de la cadena, en especial de las autoridades gubernamentales, hacia las fabricantes para homologar este tipo de cuestiones y que exista una “coherencia” en la traducción de la data. 

“Es clave que todos estén jalando, sobre todo a los fabricantes asiáticos, a esta apertura con los datos. Que tengan un soporte de estándares conocidos y que haya una normalización de las señales que entregan los vehículos para que todos tengamos la vida más fácil”, comenta Giraldo.

Finalmente, cierra: “Esto tiene que ser impulsado desde los Gobiernos que están detrás de estos proyectos. Que pidan que los fabricantes tengan una metodología o una entrega más normal de los datos para que todo el mundo tenga la misma información y se pueda sacar provecho de los datos, que son los que van a impactar en la operación y en la rentabilidad de estas operaciones”.

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