La firma automovilística Skoda, integrada en el grupo Volkswagen, invertirá 5.600 millones de euros en electromovilidad y 700 millones de euros en digitalización durante los próximos cinco años.
Así lo confirmó el consejero delegado de la compañía, Klaus Zellmer, en la presentación de su nueva identidad de marca, donde apuntó que la cuota de ventas de vehículos eléctricos de Skoda en Europa superará el 70% antes de 2030.
El fabricante checo lanzará al mercado tres nuevos modelos totalmente eléctricos en 2026. Además de un coche pequeño, está previsto lanzar un todocamino compacto y un modelo de siete plazas para familias.
El prototipo del Vision 7S, con autonomía de 600 kilómetros, ofrece un adelanto de cómo será dicho todocamino.
Asimismo, la marca está reforzando su cartera de productos de motores de combustión y presentará la nueva generación del Superb y el Kodiaq en la segunda mitad del próximo año. En 2024, le seguirá el renovado Octavia.
Por otro lado, Skoda Auto desarrolló un nuevo lenguaje de diseño, que se desplegará gradualmente a partir del próximo año, definido por líneas claras y reducidas.
Entre los elementos característicos del nuevo lenguaje se encuentran el nuevo frontal con el denominado ‘TechDeck Face‘ y el uso de materiales sostenibles en el interior.
El nuevo logotipo de la marca ya no utiliza gráficos esculturales en 3D. Bajo la dirección del departamento de Marketing, empleados de toda la empresa participaron en el desarrollo de la nueva identidad corporativa.
Además, se llevó a cabo una encuesta a 2.200 personas de seis mercados (Alemania, India, Israel, Italia, Noruega y República Checa) sobre una selección de versiones del logotipo a partir de un total de 165 diseños para determinar el futuro logotipo de la marca.
La identidad corporativa también se ha reconsiderado sustancialmente. En términos de color, Skoda utilizará ahora dos tonalidades verdes diferentes: los colores Esmeralda y Verde Eléctrico, que representan la ecología, la sostenibilidad y la electromovilidad.