Del total de unidades, 20 pertenecen a Cutcsa y el resto a las cooperativas, lo que representó una inversión cercana a los US$ 40 millones.
Se trata de los primeros ómnibus eléctricos adquiridos en el marco de un subsidio creado para impulsar su incorporación, promovido por los ministerios de Economía y Finanzas; Industria, Energía y Minería; Transporte y Obras Públicas y Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente.
El subsidio impulsa la incorporación de ómnibus eléctricos por parte de todos los operadores de transporte público del país, cubriendo la diferencia de precio entre un ómnibus diesel y uno eléctrico de similares dimensiones.
De este modo, cualquier operador regular puede comprar un ómnibus eléctrico al precio que compraría uno diesel convencional.
Como primera etapa de este subsidio, comenzarán a funcionar en Montevideo, para los cuales se solicitó subsidio en la primera convocatoria pública a operadores realizada en 2019.
En los próximos meses se esperan también incorporaciones en el interior del país.
La incorporación de estas unidades eléctricas forma parte del proyecto Movés , implementado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y ejecutado por el MIEM y el Mvotma.
Fue financiado por el Fondo del Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés), que apoyó el proceso desde el punto de vista técnico y con fondos adicionales para acelerarlo.
Movés promueve una movilidad más sostenible, busca facilitar y democratizar la movilidad y minimizar sus impactos negativos.
La incorporación de vehículos eléctricos apunta a que las empresas conozcan esta tecnología y sus beneficios.
El sistema colectivo de pasajeros de Montevideo representa aproximadamente el 7% de las emisiones de gasoil. A su vez, el transporte, en particular con vehículos diésel, es de los mayores emisores de partículas finas y black carbón en el ambiente en las grandes ciudades.