El primer ministro y ministro de Hacienda de Tailandia, Srettha Thavisin, se entrevistó con Elon Musk, jefe de Tesla, durante una visita a Nueva York en la que hablaron del sector de los vehículos eléctricos.

Tailandia ha estado ofreciendo incentivos a los fabricantes de vehículos eléctricos y baterías, así como recortes fiscales a los compradores locales de vehículos eléctricos, para seguir siendo un centro automovilístico regional.

El primer ministro Srettha, que se encuentra en Nueva York para asistir a la Asamblea General de las Naciones Unidas, dijo que había hablado con Musk sobre el fabricante de vehículos eléctricos Tesla y su empresa de cohetes y satélites SpaceX, incluida su empresa de Internet Starlink.

En un comunicado, el gobierno tailandés afirma que el primer ministro dijo a Musk en una videoconferencia que su administración estaba dispuesta a apoyar las inversiones dentro del marco de incentivos existente.

El comunicado decía: “Tesla elogió el capital humano tailandés, que era adecuado para la inversión”.

Entre los fabricantes de automóviles con plantas en Tailandia figuran Toyota y Honda. El país produce anualmente entre 1,5 y 2 millones de vehículos, de los que se exporta aproximadamente la mitad.

Los vehículos eléctricos han ido ganando terreno en el Sudeste Asiático, un mercado tradicionalmente dominado por los fabricantes japoneses.

Los datos de Counterpoint Research muestran que los vehículos eléctricos representaron el 6,4% de todas las ventas de turismos en la región en el segundo trimestre, frente al 3,8% del primer trimestre.

Alrededor de la mitad de las ventas regionales de vehículos eléctricos proceden de Tailandia, seguida de Vietnam e Indonesia, con fabricantes chinos como BYD a la cabeza por un amplio margen.

Tesla, también popular en Tailandia, lanzó modelos en este mercado en expansión el año pasado. Según Counterpoint, el Sudeste Asiático representó menos del 1% de las ventas mundiales de Tesla.