La experiencia internacional muestra que la infraestructura de carga de acceso público es indispensable para viajes interurbanos, vehículos que recorren una gran cantidad de kilómetros al día, y usuarios sin posibilidad de cargar en el hogar. Allí juega un rol como condición necesaria la infraestructura de carga pública.
¿Cuáles son las barreras que dificultan la operación e implementación de proyectos de estas características en Chile? A ello da respuesta la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE) en su reciente estudio publicado.
En tanto identifica como obstáculos: el desconocimiento general de la electromovilidad y la poca experiencia en estos proyectos; la dificultad para articular a múltiples actores; la regulación actual y el funcionamiento de las instituciones que no se ajusta a la infraestructura de carga pública; el espacio público limitado y la competencia con otros usos; la rentabilidad baja a corto plazo; pocos instaladores con experiencia; dificultades en la tramitación de solicitudes de conexión a la red de distribución; y vandalismo, hurto y accidentes.
Ignacio Rivas Zeballos, en calidad de autor del estudio, comentó a Portal Movilidad: “Esta publicación es parte de una iniciativa de la Agencia, que busca entregar información y herramientas para la toma de decisiones de infraestructura de carga pública”.
Y adelantó: “Durante los próximos meses, desarrollaremos otras acciones que buscan mitigar algunas de las barreras que se listan en este estudio. En ese sentido, yo esperaría que no tuviéramos que realizar un siguiente estudio sobre estas barreras, sino que podamos en conjunto con el ecosistema de la electromovilidad ir disminuyendo las barreras actuales”.
Consultado por el motivo disparador del análisis indicó en el trabajo diario observaron una serie de dificultades en la implementación de infraestructura de carga en espacios públicos, que finalmente impactan en atrasos, incertidumbre y sobrecostos.
Por esto, decidieron caracterizar estas barreras para que el ecosistema de la electromovilidad se anticipe a ellas, y pueda desarrollar soluciones a través de políticas públicas, coordinación, regulación, nuevos modelos de negocio y emprendimientos.
En cuanto al proceso para superar las mencionadas barreras, Rivas, remarcó: “El primer paso es la publicación de este estudio, es decir, identificar y caracterizar las dificultades de manera que podamos comenzar a trabajar en las soluciones. Creemos que este tipo de documentos pueden ser útiles para generar un entendimiento común de la situación actual, y así, trabajar de manera más efectiva en las soluciones”.
Otra de las voces autorizadas es Joaquín Rosas Piel en representación de Rocky Mountain Institute (RMI) que ofició en cuestiones de revisión y edición del estudio. El profesional indicó a Portal Movilidad: «El informe es un gran aporte para establecer los cimientos para alcanzar las metas de adopción de autos eléctricos, especialmente de vehículos privados para pasajeros y flotas comerciales. Es importante el rol que la Agencia está tomando al situar esta información a disposición de uso público, y a una etapa temprana, para que futuras iniciativas puedan anticiparse a estas barreras».
Además agregó: «Este tema también está en la discusión actual acá en Estados Unidos, en donde RMI publicó hace unas semanas un informe sobre cómo la electrificación de servicios de transporte como Uber y Lyft pueden estimular la inversión en una red de carga de vehículos más equitativa en comunidades de bajos ingresos».