Ante un contexto de crisis para el sector automotor, importadores y concesionarias ya cuentan con su estrategia 2024, donde los vehículos de cero y bajas emisiones ocupan un rol clave. 

En el caso de Motorysa, el objetivo es ofrecer nuevos modelos, pero con precios realmente competitivos frente a las tecnologías de combustión interna. 

“Nos preguntamos cuánto vale un vehículo a gasolina en determinado segmento y, en consecuencia, nos cuestionamos cuánto debería costar su par eléctrico. La idea es posicionar prácticamente a estos últimos al mismo precio que el resto”, asegura Marco Pastrana, gerente general de la empresa, en diálogo con Mobility Portal Latinoamérica. 

Y agrega: “Uno de nuestros próximos retos es llegar lo más cerca posible al precio de las unidades a gasolina”. 

Vale recordar que, si bien aún resta conocer las cifras de diciembre, el balance de ventas 2023 por parte del sector automotriz no es positivo. 

Según la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (ANDEMOS), este año se comercializaron 166.954 vehículos de cuatro ruedas, es decir, un 30,6% menos que en 2022, cuando se registraron 240.681. 

No obstante, el segmento eléctrico avanza en dirección opuesta. A noviembre, registra un crecimiento del 5,5% con 3.215 unidades vendidas.

De hecho, en caso de no contabilizar en el análisis a los buses, el porcentaje es aún más esperanzador: del 56,1%. 

En el caso de los híbridos, el aumento fue del 9,4% con 23.043 unidades comercializadas, mientras que en el de los enchufables se registró una caída del 3,8%.

Motorysa se prepara para más coches BYD

En esta apuesta por los eléctricos, Motorysa lanzará cuatro modelos nuevos, dos en cada semestre. Dos de ellos son completamente nuevos, mientras que los otros dos “reemplazan” a otros vehículos que ya tienen en el inventario. 

Por ejemplo, el Seagull de BYD, un carro del segmento desembarcará en dos versiones: uno con 300 kilómetros de autonomía, y otro de 400. 

“También estamos pensando en lanzar el primer vehículo de rango extendido de Colombia”, asegura Pastrana. 

Se trata de un híbrido enchufable con más de 120 kilómetros de autonomía y “una tecnología excepcional”, según el gerente de Motorysa. 

La idea también es traer la pick up híbrida de BYD, y un modelo más que, por el momento, será una incógnita para el mercado.

La crisis económica, un golpe al sector automotriz

«Ha sido el peor año de los últimos 20 en Colombia. Todas las marcas cayeron. Algunas de forma más dramática que otras», analiza Pastrana.

¿Cuáles fueron los factores de esta declive? Según el gerente general de Motorysa, el primer culpable es la economía nacional.  

«Tenemos una inflación que creció el año pasado y se mantuvo durante este año, rondando el 13.25%. Segundo, contamos con una subida de tasa de interés, que viene del 3% anual al 11.25%. El costo del dinero en Colombia, en menos de un año, se triplicó, generando una subida absurda en las tasas de intereses», describe.

Y añade: «Un préstamo para vehículos en Colombia estaba alrededor del 15% y 3% anual, hoy estamos viendo niveles del 35%».

En consecuencia, Pastrana encuentra una «desaceleración brutal de la economía».

«Llevamos los tres trimestres de este año con crecimiento cero y caemos. Eso ha afectado a los hidrocarburos. A eso se le suma el anuncio de la no renovación de contratos de explotación de hidrocarburos. Entonces, hay cero inversión extranjera», indica.

Un «frenazo» a las inversiones en infraestructura y construcción, sumado al descenso de bienes durables, señala Pastrana, se suman a los culpables de este golpe para el sector.