La brasileña Intelbras espera crecer en el negocio de la electromovilidad en los próximos años, aseguró Matheus Luiz Rodrigues, gerente del segmento de cargadores de vehículos eléctricos de la empresa.
Intelbras lanzó recientemente una cartera de cargadores para vehículos eléctricos, marcando su debut en el sector.
La nueva línea contiene cargadores de diferentes potencias y diseños y es compatible con los principales modelos de vehículos eléctricos del mercado brasileño: residencial (7,4 kW), mini portátil (3 kW), urbano (11 kW y 7,4 kW) y empresarial (7,4 kW). kW y 22 kW).
Rodrigues explicó que para 2030 la flota de vehículos eléctricos en Brasil, que hoy comprende alrededor de 160.000 unidades, deberá superar los 2 millones, entre modelos híbridos (HEV), híbridos enchufables (PHEV) y 100% eléctricos (BEV).
Los HEV no dependen de una fuente de alimentación externa para recargar la batería, ya que aprovechan el frenado (energía cinética) para generar la energía utilizada.
“Es en este nicho donde se concentra la principal preocupación de los actuales propietarios o de quienes pretenden adquirir vehículos eléctricos: la autonomía y el acceso a infraestructuras de recarga”, afirma Rodrigues a BNAmericas.
También agregó que la movilidad eléctrica debe transitar hacia vehículos 100% eléctricos en aras de la sustentabilidad, ya que estos modelos no emiten gases de efecto invernadero.
La propia Intelbras desarrolla sus cargadores a través de un programa de I+D financiado por los accionistas.
La empresa también trabaja con el gobierno a través de iniciativas como el programa Más Luz para Todos, que proporciona electricidad a zonas rurales necesitadas.
“Por lo tanto, tenemos esta capilaridad que nos permite lograr la movilidad eléctrica con nuestra potencia instalada y comercial”, comenta Rodrigues.
Con más de 5.000 empleados, Intelbras tiene cinco unidades en las ciudades de São José, Santa Catarina (con dos); Santa Rita do Sapucaí, en Minas Gerais; Manaus, en el Amazonas; y Jaboatão dos Guararapes, en Pernambuco – además de uno en construcción en Tubarão, también en Santa Catarina, y exporta a varios países de América Latina.