Buses Hualpén entiende que, de momento, se encuentra funcionando de forma “reactiva” en su incorporación de vehículos eléctricos en función de las licitaciones en las que participa o los clientes que van en línea con la carbono neutralidad.

No obstante, cuenta con un plan de sostenibilidad de la empresa con el que cambiaría su forma de actuar hacia un modelo proactivo.

Es decir, concretar la sustitución de flota analizando los recorridos y sumando vehículos eléctricos sin que el cliente lo solicite.

“Al 2024 llegaremos a electrificar un 10% o 15% de la flota”, reconoce en diálogo con Mobility Portal Latinoamérica, Edgar de la O, subgerente de Electromovilidad en Buses Hualpén.

No obstante, en los últimos años se aumentó el porcentaje de compra de vehículos eléctricos en comparación con las de unidades a combustión interna.

Actualmente, la flota de la empresa de transporte privado es de más de 1800 vehículos, de los cuales, 40 son eléctricos.

“En nuestra política revisamos, antes de comprar uno diésel, si el eléctrico es factible para esta compra”, reconoce Edgar de la O.

Y apunta hacia los próximos años: “En miras de 2025 esperamos poder tener un 30% o 40% de la flota electrificada y en 2030, más del 50%”.

Estos son datos no formalizados como tales pero que responden a las proyecciones en función de las variables que la firma analiza para pensar la movilidad eléctrica.

Por otra parte, el ejecutivo de Hualpén admite: “Estamos tratando de convencer a los clientes de ir hacia contratos mas largos, que permitan apalancar la inversión”.

Edgar de la O, subgerente de Electromovilidad en Buses Hualpén.

Esto sucede en función de que se complica en contratos cortos de, por ejemplo dos años, equiparar los resultados del diésel más allá de los beneficios que presenta la electromovilidad en el OPEX.

Por eso, grandes licitaciones están apuntando a ocho años o más de operación para encontrar este equilibrio, tal caso como las del Sistema de Transporte Público Metropolitano.

Hualpén es el mayor operador de transporte privado con electromovilidad y orienta sus esfuerzos en una mejora continua de todos los procesos.

“Los clientes con mayor antigüedad nos piden más electromovilidad”, cuenta Edgar de la O. Por eso, desde la firma se pretende seguir siendo pioneros y avanzar en esa línea.

De hecho, forma parte del grupo de empresas que anunciaron un piloto de bus a hidrógeno en formato interurbano.

La principal conclusión de estos años de operación en electromovilidad es: mucho aprendizaje.

“Hemos cambiado el chip de prácticamente toda la empresa y pensamos en kw/h, electricidad, cálculos de emisiones, etcétera”, comparte de la O.

Primer proyecto Hualpén de electromovilidad de 2024

La semana pasada se realizó la presentación del primer proyecto de electromovilidad de este año. Se trata de dos buses eléctricos con varios hitos a remarcar.

Por un lado, son los primeros de esta tecnología en cada región: Ñuble y Biobío. En la presentación estuvieron los Seremis de Transportes respectivos quienes afirmaron apuntar a que la electromovilidad llegue a las regiones.

El otro hito tiene que ver con la empresa que adquiere el servicio: Beneo. Se trata de una compañía de origen alemán dedicada a la producción de ingredientes funcionales.

De esta manera, rompe con la generalidad al no tratarse de una firma dedicada a la rama de la energía o la minería.

“Estamos viendo que se puede ir masificando la electromovilidad, cada vez son mas actores y de otros rubros los que están apuntando hacia esa transición”, comenta el subgerente de Electromovilidad de Buses Hualpén sobre este proyecto.

Buses eléctricos de Hualpén para Beneo