ABC Metalúrgicos realizó asambleas en las automotrices Scania y Mercedes en São Bernardo para movilizar a los trabajadores contra la decisión del gobierno de importar más de 3.000 autobuses eléctricos de China y generar más desempleo en Brasil.
Las movilizaciones también ocurrieron en otras regiones de Brasil, en empresas que tienen fábricas de autobuses.
“Queremos llamar la atención sobre este debate. De nada sirve saber esto y no hacer nada. Tenemos que presionar al Congreso y discutir este tema en Brasilia. Decir a los diputados y senadores que los trabajadores del sector de autobuses de todo Brasil están dispuestos a hacer lo que sea necesario para luchar por sus puestos de trabajo”, advirtió el presidente del sindicato, Moisés Selerges.
El director ejecutivo del Sindicato, presidente de IndustriALL-Brasil y de la Agencia de Desarrollo Económico del Gran ABC, Aroaldo Oliveira da Silva, señaló que Brasil representa actualmente el 1% de la industria en el mundo, mientras que China es responsable del 25% de toda la industria mundial.
“El debate de política industrial es importante porque están en juego nuestros empleos y porque la industria genera encadenamientos productivos y empleos que agregan más valor. Además, los trabajos de manufactura impulsan otros sectores de la economía, como los servicios y el comercio”.
El líder criticó la amplia liberalización económica adoptada por el gobierno de Bolsonaro y citó otros productos que se pueden traer del exterior como bicicletas, café, equipos de energía solar, mantequilla y hasta queso.
“Son más de 200 productos que el gobierno ha permitido importar en Brasil, esto hará estallar la industria nacional, ya hay 13 millones de desempleados, casi 30 millones que están subempleados, además de los desanimados que ya desistieron de buscar para el trabajo”, subrayó.
Está en la ley
Según un medio local, Aroaldo explicó que hay una ley sobre la liberación del impuesto de importación, pero que esto solo puede ocurrir si el producto o similar no está disponible en el país.
En cuanto a las importaciones, recordó que hay seis empresas chinas que piden la liberación del impuesto y que el gobierno aceptó la solicitud con la justificación de que no hay autobuses eléctricos en Brasil.
“Sabemos que Mercedes y otras empresas ya lanzaron buses eléctricos y que Scania lanzó el bus a gas con cero emisiones contaminantes. Hemos discutido el tema con las asociaciones empresariales. Sabemos que la llegada de buses importados, principalmente de China, desincentiva el desarrollo y la producción nacional. Además, a partir del próximo año pueden venir camiones de México sin impuesto de importación, son nuestros trabajos los que están en riesgo”.
En el Congreso
Aroaldo afirmó que el Sindicato ya guió el debate en el Congreso Nacional, junto a diputados y senadores, y que existe la intención de convocar al gobierno federal y a las automotrices para discutir formas de frenar las importaciones y garantizar empleos y desarrollo en Brasil.
Scania
El coordinador de representación de Scania, Francisco Souza dos Santos, conocido como Maicon, señaló que el gobierno muestra una total falta de empatía en relación a la industria nacional y no se preocupa por los trabajadores.
“El gobierno solo mira al agronegocio, pero también es importante que mire a la industria nacional, que es la encargada de generar empleos de calidad. Si se exonera el impuesto de importación de ómnibus, prácticamente se hace inviable cualquier inversión de cualquier empresa en Brasil. No estamos en contra de las energías limpias, ya sea electrificación, gas o etanol, pero notamos que el gobierno necesita conducir este proceso a través de una política industrial”.
En números
• Brasil representa el 1% de la industria en el mundo.
• China es responsable del 25% de toda la industria mundial.
• La industria brasileña representa menos del 11% del PIB.
• El sector de autobuses es responsable de casi 130 mil empleos directos e indirectos.