En Colombia se está montando un laboratorio de formación en electromovilidad con simuladores y un vehículo eléctrico que se convertirá en el primero de este tipo.

La intención es lanzarlo durante el mes de junio. Andrés Castro Rojas, Coordinador académico en Techink indica a Portal Movilidad:

“Falta conocimiento en la formación al personal como tal porque llegan nuevos productos y cuando hay problemas se necesitan soluciones”.

Uno de los ejes relevantes del proyecto se trata de conseguir aliados estratégicos para investigar los productos.

“Estamos trabajando con los distribuidores, siempre hay un tema de confidencialidad cuando sacan un producto y se firman las cláusulas correspondientes”, explica Castro Rojas.

En este sentido, se entiende que para brindar información las marcas son celosas ya que todas hacen firmar una cantidad de papeles para asegurar la confidencialidad.

“Cuando hablamos de tecnología para actualizar el laboratorio tendremos que tener alianzas con las marcas porque son las que tienen la tecnología al lado”, indica el profesional que pretende que el laboratorio cuente con la tecnología de punta presente en el país.

Los simuladores arribaron al país hace algunas semanas.

En tanto, un Volkswagen e-up! se utilizará para capacitar a los estudiantes de automoción para que se conviertan en técnicos de automóviles eléctricos.

Se trata del primer Volkswagen e-up!, que se convirtió en un vehículo de diagnóstico, en América del Sur. Es una de las unidades utilizada durante el World Skills 2022 en Dresde, Alemania.

El vehículo que tendrá el laboratorio.

“La formación en electromovilidad es una carrera continua porque cada vez que llega un nuevo producto tenemos que investigar qué cosas cambiaron”, asegura Castro Rojas al entender que son muchas las cosas cambian de una marca a otra o de un vehículo pequeño a uno grande.

El objetivo es lograr una formación a medida con un fuerte enfoque sobre todo en lo que tiene que ver con riesgo eléctrico, el protocolo y tratamiento de intervención.

Además, la intención es aplicar la formación a cada una de las marcas: “Tanto la formación técnica como el producto como tal y los equipos de diagnóstico son para eso”.

El retrofit también es una arista a trabajar en el laboratorio.

La formación teórica ya comenzó el año pasado con quince “semilleros de investigación” y este año arrancaron otras quince personas que están estudiando diferentes ingenierías y son las que van a estar en el mercado y enfrentarse con los problemas reales.

A su vez, se aborda en conjunto con el Consejo Nacional de Técnicos Electricistas (CONTE) un marco regulatorio para estos técnicos ya que hay licencias que deberían tener las personas para manipular un vehículo eléctrico.

Entre el ideal del profesional capacitado en el laboratorio, Castro Rojas reconoce tres aspectos:

Primero: “La seguridad, la persona tiene que pensarlo en todo lo que haga”.

Segundo la capacitación permanente.

Y, por último: “Responsabilidad con las personas que están alrededor de esos vehículos”.