Con la intención de modernizar el servicio de taxis, se está trabajando en un proyecto que busca incorporar vehículos eléctricos y otras tecnologías eco amigables.

Agapito Blanco, concejal de Rosario de Juntos Por el Cambio, revela en exclusiva la propuesta que podría cambiarle la cara al transporte público de la ciudad. 

El proyecto, presentado por Blanco, pretende modificar la ordenanza 2649/80, que regula actualmente el servicio de taxis, para incluir vehículos propulsados por energía eléctrica u otras tecnologías alternativas. 

Esta reforma es parte de un esfuerzo por mitigar el cambio climático y reducir la contaminación ambiental en la ciudad. 

La iniciativa no solo se enfoca en la sostenibilidad, sino también en los beneficios económicos para los taxistas, un punto clave a la hora de pensar la transición hacia las cero emisiones en Argentina. 

«Se busca que vía Banco Municipal de Rosario se otorguen créditos accesible con tasa subsidiada, pero independientemente de eso, la idea es que se articulen acciones con Provincia y Nación para tratar de quitarle a los vehículos toda carga impositiva y poder lograr que sean más accesibles para el uso público», explica el edil.

Es así que la propuesta también incluye una serie de incentivos fiscales para fomentar su adopción. 

Los taxistas que adquieran vehículos «Eco-Amigables» podrían beneficiarse de descuentos de hasta el 40% en trámites habilitantes.

En este marco, Blanco, afirma: “Queremos que sea más accesible para los taxistas hacer este cambio”.

Pero, lo cierto es que en el país, los modelos de eléctricos disponibles hasta el momento son escasos y costosos.

Ante esta problemática, el concejal entiende que «habrá mucha oferta cuando ingresen los vehículos chinos en masa que son más baratos».

De más está decir que la presencia China en el mercado eMobility latinoamericano se nota, y es donde ven una oportunidad para dar el salto y establecer producción propia.

La meta del proyecto es clara: acelerar el proceso de transición «sobre todo en el transporte público, así se empiezan a dar esos mensajes porque sino cuando hablamos agenda 2030 la sustentabilidad termina siendo una expresión de deseo, pero en lo concreto no se visibiliza«.

La agenda 2030 implica un compromiso de la Municipalidad con el medioambiente donde proyectos como el de Blanco son esenciales para cumplirla.

Por eso, de alcanzarse la iniciativa, los nuevos taxis eléctricos no solo tendrán ventajas tecnológicas y económicas, sino que también serán fácilmente identificables gracias a un nuevo esquema de colores.

En lugar del tradicional negro y amarillo, estos vehículos lucirán un ploteo blanco y verde, promoviendo su involucramiento con el medio ambiente y también generando que los ciudadanos de Rosario se informen y concienticen.

Sin embargo, la implementación de estas reformas no será fácil. 

La infraestructura de recarga en Rosario es limitada y necesitará desarrollarse para soportar una flota de taxis eléctricos. 

Aquí, Blanco indica que las recargas en general suelen ser domiciliarias, pero asegura que si se llegaran a incorporar vehículos eléctricos a la flota de taxis, la infraestructura de carga pública crecerá para satisfacer la demanda.

A su vez, otro eje del proyecto establece que deberán funcionar al menos 16 horas al día, teniendo en cuenta el tiempo necesario para la recarga de las baterías. 

Este requisito busca maximizar la eficiencia y el uso de los nuevos taxis.

Con respecto a la denominación de “Eco-Amigables”, serán aquellos que utilizan para su propulsión alguna de las siguientes tecnologías:

• Propulsión con motores eléctricos exclusivamente
• Propulsión eléctrica y alternativamente o en forma conjunta por motor de combustión interna, vehículos híbridos, vehículos híbridos enchufables
• Propulsión eléctrica alimentada por hidrógeno
• Propulsión por otro tipo de tecnologías alternativas, según sean definidos por la Autoridad de Aplicación

En el caso de que los titulares de licencias de taxi quieran adquirir un vehículo “Eco-Amigable” para ofrecer el servicio, deberán cumplir con una serie de requisitos.

Entre ellos no tener más de 15 años de antigüedad y someterse a un “control semestral técnico-mecánico», con el fin de verificar si se encuentra en condiciones de prestar el servicio.

En un contexto donde la crisis del transporte y la competencia de servicios como Uber complican el panorama, esta iniciativa representa un intento por modernizar y mejorar el sistema en Rosario. 

Sobre esto, el concejal, reflexiona: “Apostamos por un sistema municipal eficiente que pueda competir directamente con aplicaciones como Uber y Cabify«.

¿Será posible esta transformación en medio de la crisis o se trata solo de una iniciativa para empezar a concientizar a los rosarinos?

¿La Federación de Conductores de Taxis y BYD?

Recientemente y con una apuesta sin tapujos, la Federación de Conductores de Taxis presentó un proyecto para la importación de vehículos eléctricos BYD. ¿El objetivo? Renovar la flota de taxis de Buenos Aires. 

José Ibarra, Secretario General del gremio, mostró en un evento el modelo elegido mientras destacaba la importancia de exenciones impositivas para vehículos de trabajo.

La iniciativa contó con la presencia de Stephen Deng, vicepresidente de BYD Auto Industry, y autoridades locales que buscan apoyar este cambio hacia la sostenibilidad urbana y la modernización del transporte público en la ciudad.

Se trata del BYD D1, un monovolumen de 4.39 metros de largo con capacidad para cinco pasajeros, destaca por sus puertas traseras corredizas que facilitan el acceso y egreso en entornos urbanos.

Impulsado por un motor de 100 kW que ofrece una potencia estimada de 93 CV y un torque de 180 Nm, este vehículo garantiza agilidad y eficiencia energética.

Con una autonomía de 418 km con baterías completamente cargadas y una velocidad máxima de 130 km/h, el BYD D1 puede representar el futuro de los taxis eléctricos en la capital argentina.

A medida que esta iniciativa avanza, se espera que el Ejecutivo porteño respalde condiciones favorables para la adopción de estos vehículos, facilitando así la transición hacia una flota más limpia y eficiente en Buenos Aires.