El Gobernador Alejandro Armenta Mier confirmó que Puebla inicia la transición hacia la electromovilidad con la adquisición de seis camiones eléctricos para transporte público y diez taxis eléctricos que reemplazarán a unidades antiguas.
Junto a la secretaria de Movilidad y Transporte, Silvia Tanús Osorio, presentó el Programa de Reordenamiento y Modernización del Transporte Público, después de 12 años de que no se implementaba.
“El objetivo central de este programa integral son las y los ciudadanos, para que contemos con un servicio que sea de calidad, que nos permita el traslado de una zona a otra y podamos tener seguridad; esto va de la mano de los programas de Seguridad Ciudadana y desde luego es un trabajo integral”, declaró el mandatario.
Armenta Mier destacó además que esta iniciativa forma parte de su estrategia de seguridad y desarrollo urbano, enfatizando que los ciudadanos serán los principales beneficiarios.
El programa considera financiamientos para la sustitución de unidades con recursos de Nafin por 250 millones de pesos, aportaciones a fondo perdido en unidades eléctricas, condonación de multas y recargos y aumentar la vida útil permitida a taxis de 7 a 10 años, entre otros apoyos.
Las unidades serán suministradas por las empresas U-Link y King Long, debido a que actualmente no existe disponibilidad en el mercado mexicano de estos vehículos para el transporte colectivo.
La secretaria de Movilidad y Transporte, Silvia Tanús Osorio, explicó que esta compra en el extranjero se realizará por única vez, ya que en el futuro cada concesionario podrá elegir libremente a sus proveedores de vehículos eléctricos.
«Van a ser 10 taxis y seis camiones para comenzar con el proceso, porque no hay en el mercado; por única vez, las posteriores podrán los concesionarios adquirirlas donde gusten», afirmó Tanús.
Un Estado que se encamina hacia la electromovilidad
Con esta medida, Puebla se suma a la lista de estados en México que están apostando por la electromovilidad en el transporte público, con el objetivo de mejorar la calidad del servicio, reducir las emisiones contaminantes y ofrecer una alternativa más eficiente y moderna para los usuarios.
Entre las acciones clave del programa se incluyen:
- Sustitución de unidades antiguas por vehículos eléctricos y de bajas emisiones.
- Condonación de adeudos por control vehicular y derechos de concesión de los últimos cinco años.
- Incremento de la vida útil permitida para taxis, pasando de 7 a 10 años, beneficiando a más de 6,100 permisionarios.
- Créditos para transportistas con un fondo de 250 millones de pesos gestionado con NAFIN y entidades financieras internacionales.
- Apoyo a fondo perdido para la compra de unidades eléctricas, con hasta un 16.75% del enganche cubierto por el Gobierno.
La secretaria de Movilidad y Transporte destacó que este programa no tiene un carácter recaudatorio, sino que busca incentivar la transición hacia un sistema de transporte más eficiente, moderno y seguro.
Además, se llevará a cabo una Revista Vehicular, que iniciará el 15 de abril y durará 60 días, con el objetivo de obtener información actualizada sobre el estado de la flota de transporte público y definir las mejores estrategias para su modernización.
«Se garantizará que las unidades que estén prestando el servicio de transporte público cumplan con las condiciones de seguridad y calidad que la ley exige, protegiendo así a los usuarios», explicó Tanús.
Resistencia del sector del transporte público

Una de las empresas que proveerá unidades eléctricas a Puebla.
A pesar de los esfuerzos del Gobierno estatal, el sector transportista se ha mostrado renuente a la transición hacia vehículos eléctricos.
En octubre de 2024, antes del inicio del mandato de Alejandro Armenta, transportistas rechazaron la propuesta de sustituir unidades de combustión por eléctricas, alegando que la inversión era demasiado alta.
Además, solicitaron un aumento en la tarifa del pasaje de hasta 19 pesos, además de la eliminación de los descuentos para estudiantes y adultos mayores.
Sin embargo, el Gobierno negó la posibilidad de incrementar las tarifas si antes los transportistas no cumplen con los requisitos de modernización establecidos en el programa.
«Los concesionarios deben comprometerse a mejorar la calidad del servicio. No habrá aumentos en la tarifa si no cumplen con la renovación de sus unidades», puntualizó Tanús.
Infraestructura de carga y financiamiento para la movilidad eléctrica
Uno de los principales desafíos que enfrenta la electrificación del transporte en Puebla es la infraestructura de carga.
Actualmente, México no cuenta con una red de carga pública suficiente para soportar el crecimiento de flotas eléctricas en el transporte público.
Ante este panorama, el Gobierno estatal está trabajando con NAFIN, la Agencia de Cooperación Alemana GIZ y el Banco Alemán KFW para estructurar un esquema de financiamiento que incentive la compra de unidades eléctricas y que contemple:
- Apoyos a fondo perdido del 10% para autobuses diésel y hasta un 16.75% para unidades eléctricas.
- Créditos con aval del Gobierno estatal, permitiendo a los concesionarios acceder a 250 millones de pesos en financiamiento.
- Planes de instalación de estaciones de carga en puntos estratégicos para garantizar la operatividad de los nuevos vehículos eléctricos.