Uruguay | Micromovilidad
viernes 15 de noviembre de 2024
Micromovilidad pendiente. Las 3 propuestas a Gobierno para incluir rodados eléctricos ligeros en Uruguay
A pesar del avance en la electrificación de autos, Uruguay aún ignora a la micromovilidad eléctrica en sus políticas públicas. Actores privados exigen incentivos y una infraestructura adecuada para rodados ligeros, como bicicletas, motos y monopatines eléctricos, que podrían revolucionar la movilidad urbana del país.
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Mientras Uruguay avanza a paso firme en la electrificación de vehículos de cuatro ruedas, la micromovilidad eléctrica sigue siendo el invitado ausente en las políticas públicas

Actores privados del sector alertan sobre esta omisión y proponen incluir rodados ligeros eléctricos, como bicicletas, monopatines, motos eléctricas y cargo bikes, en los incentivos y proyectos estatales.

«Si queremos ciudades más limpias y ágiles, hay que empezar por el segmento que mueve a más personas y genera menos impacto ambiental», afirma Matías Fernández Quagliata, cofundador de Loop Bikes, en diálogo con Mobility Portal Latinoamérica.

Uruguay, ejemplo en la región en términos de energías renovables y transición energética, enfrenta un desafío pendiente: hacer de la micromovilidad un pilar de su estrategia de movilidad sostenible. 

Según empresarios del sector, la infraestructura y los incentivos actuales no están diseñados para estos vehículos eléctricos más pequeños, dejando al margen a miles de usuarios potenciales.

El llamado de los privados: repensar la movilidad desde las bases

Para los actores del sector, incluir la micromovilidad eléctrica en las políticas públicas no solo es una oportunidad económica, sino también una necesidad social y ambiental. 

«Por el precio de un auto eléctrico, puedes electrificar la movilidad de 20 personas con rodados ligeros», señala Fernández Quagliata. 

Además, destaca que gran parte del tránsito urbano está dominado por motos y bicicletas, especialmente en sectores como el delivery, la logística y los desplazamientos cortos diarios.

Las propuestas son claras:

  • Extender los beneficios fiscales y subsidios actuales de los vehículos eléctricos hacia este segmento.
  • Incorporar rodados ligeros en los proyectos de electrificación de flotas empresariales.
  • Garantizar infraestructura adecuada, como ciclovías y estaciones de carga seguras para rodados eléctricos ligeros.

«Uruguay necesita cambiar el chip y entender que no solo se trata de autos eléctricos. Si realmente queremos ciudades más humanas, debemos mirar hacia los vehículos que ocupan menos espacio, consumen menos recursos y son accesibles para más personas», sostiene.

Avances en movilidad de cuatro ruedas: un ejemplo a seguir

En contraste, el sector de los vehículos eléctricos de cuatro ruedas ha recibido un apoyo más sólido en Uruguay. 

Según Fernández Quagliata, el país cuenta con beneficios fiscales significativos para la compra de autos eléctricos, como exoneraciones de IVA y aranceles de importación, así como incentivos para la instalación de estaciones de carga.

 «Es un avance importante, pero no debería limitarse a los autos. El impacto real en las ciudades viene cuando democratizar la movilidad», subraya.

Este enfoque en los vehículos más grandes ha permitido un crecimiento sostenido en la flota de autos eléctricos, pero deja un vacío en el segmento de micromovilidad, que podría complementar estas iniciativas con soluciones más accesibles y ágiles.

Vehículos eléctricos ligeros: del nicho al estilo de vida

Lejos de quedarse en palabras, el sector privado ya ha demostrado cómo liderar con hechos.

Un caso destacado es el de Loop Bikes, empresa uruguaya que comenzó importando bicicletas eléctricas hace más de una década y hoy se ha transformado en un fabricante local con diseño propio

«Al principio, era un producto para curiosos y pioneros. Hoy, nuestras ventas se han duplicado y vemos cómo las personas adoptan estos rodados no solo como una alternativa, sino como su principal medio de transporte», explica Fernández Quagliata.

El cambio cultural ha sido clave. «Antes, los clientes venían a probar una bicicleta como si estuvieran comprando un juguete. Ahora entran a la tienda sabiendo exactamente lo que quieren: un vehículo que reemplace al auto, al taxi o incluso al ómnibus», añade. 

Esta transformación no solo refleja la madurez del mercado, sino también la capacidad del sector privado para impulsar una nueva visión de movilidad.

Expansión regional: exportando soluciones desde Uruguay

La micromovilidad no es solo un fenómeno local.

Loop Bikes está mirando más allá de las fronteras, con planes ambiciosos de expansión en la región. 

Argentina y Brasil son los próximos destinos para consolidar su presencia, mientras que países como Paraguay ya cuentan con productos diseñados y fabricados en Uruguay.

«Nuestra meta es llevar este modelo de movilidad accesible y sostenible a toda América Latina. Ya no somos los uruguayos que venden bicicletas en Montevideo; somos una marca con proyección internacional, y eso lo logramos apostando a la calidad, la innovación y la cercanía con el cliente», afirma Fernández Quagliata.

Además, la pandemia marcó un punto de inflexión para este segmento.

La demanda de rodados eléctricos ligeros creció exponencialmente, impulsada por la necesidad de movilidad segura e independiente. 

Sin embargo, los desafíos logísticos y la falta de infraestructura adecuada siguen siendo barreras para un desarrollo más amplio.

Un futuro eléctrico que necesita más impulso

La micromovilidad tiene el potencial de transformar la movilidad urbana en Uruguay, pero para que esto ocurra, es necesario que las políticas públicas evolucionen al mismo ritmo. 

«Hoy, la micromovilidad está sola en esta carrera. Si el gobierno no empieza a incluirla en su estrategia, estaremos perdiendo una oportunidad histórica para modernizar nuestras ciudades», advierte Fernández Quagliata.

En conclusión, Uruguay tiene la capacidad de ser un líder regional en movilidad sostenible, pero necesita apostar por un enfoque integral que no deje fuera a los vehículos eléctricos ligeros. Rodados que ya están demostrando, con o sin apoyo estatal, que el futuro de la movilidad es eléctrico, compacto y accesible.

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