Al conocerse los plazos para la aprobación final del PERTE del coche eléctrico y conectado el sector presentó una leve dosis de alivio, ya que de seguir postergando los proyectos los mismos comenzarían a comprometer su realización.
Pese a eso, reconocen que de no ser aprobados se encontrarán en una situación compleja. La industria continúa sin entender cómo el Gobierno español, tras obtener el visto bueno de Bruselas, no ha publicado la orden de bases y las convocatorias de ayudas de inmediato.
Las oportunidades no faltaron, ya que desde el 9 de diciembre se han realizado tres reuniones, en las cuales brilló por su ausencia el planteo de esta iniciativa. Por ello, la expectativa se concentra en mañana 23 de diciembre.
La realidad frente a todo esto es que hay grandes proyectos que esperan concretarse por medio del giro de estos fondos. El documento detalla que los proyectos pueden ir desde fábricas de coches hasta de baterías, como es el caso de la propuesta del Grupo Volkswagen.
Según se ha detallado la empresa espera ser protagonista de una de las principales inversiones previstas dentro del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) del vehículo eléctrico. Prevén que dichas asistencias alcancen los 900 millones de euros y que unos 300 millones podrían llegar de fondos estructurales como el FEDER .
Los planes de Volkswagen para esta planta están basados en que la misma se enfoque en la producción de celdas de baterías y que las mismas sirvan para abastecer las fábricas automotrices de la firma que están ubicadas en Barcelona y Pamplona.
Detrás de esta inversión hay cuatro Comunidades Autónomas que esperan ser las elegidas para la instalación: Extremadura, Aragón, Valencia y Cataluña.
La realidad es que desde el grupo automotriz aún no han dado detalles sobre las favoritas, pero si se ha destacado el hecho que de elegir a Extremadura o Aragón, se podría acceder a ayudas más contundentes debido a que ambas son consideradas.
A su vez, desde la Comunidad Valenciana se ha estado trabajando en un proyecto liderado por Power Electronics. Mientras tanto, Extremadura prepara planes similares junto al paraguas de Phi4Tech, pero no son comparables las dimensiones de ambas iniciativas con los planes de Volkswagen.
El PERTE en detalle
Cabe recordar en este marco que, el VEC recoge en su totalidad unos 3.000 millones de euros en ayudas y movilizará una inversión total de más de 24.000 millones de euros en el periodo 2021-2023, con una contribución del sector público de 4.300 millones y un aporte de los privados de 19.700 millones.
Dicha moción fue aprobado en el Consejo de Ministros en julio y recibió el visto bueno de Bruselas el 9 de diciembre. Ademas, cuenta con el total apoyo de la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, quien ha insistido en el hecho de que el Ejecutivo, aprovechando el aceleramiento de la actividad, debe ponerlo en marcha antes de que cierre el 2021.
Según se ha detallado en el texto del Plan de Recuperación cada una de las inversiones que reciba asistencias por medio del PERTE tendrán que finalizar 30 meses después de ser aceptadas (o más tardar en 2025).
Asimismo, se especifica que se creará una comisión de seguimiento, la cual estará encargada de enviar un informe detallado con los avances a la Unión Europea durante el segundo trimestre de 2023. Además, se deberá agregar un adicional tres años después.
Finalmente, han definido que el primer informe deberá estar enfocado en el reparto de las asistencias, el segundo en la implementación, mientras que el tercero pondrá el foco en los resultados que se obtengan.