Es un hecho. Este paso marca un antes y un después en la modernización del transporte urbano, impulsado por MOVI Rosario y en colaboración con actores locales y la Universidad Nacional de Rosario (UNR).
En este contexto, Alejandro Gentile, presidente de la empresa estatal, comparte a Mobility Portal Latinoamérica los puntos clave de la histórica licitación.
Este proyecto tiene sus raíces en 2019, cuando MOVI presentó su primer prototipo de trolebús reconvertido.
Pero no fue hasta 2021, en articulación con la UNR y la empresa Invento, que se inició la reconversión de más unidades a una escala «muy reducida». Estas tomaban entre tres y cuatro meses cada una debido a las «limitaciones del mercado argentino».
“Este año, con la necesidad de mejorar el proceso y hacerlo más rápido, decidimos hacer una licitación por un total de 10 trolebuses a reconvertir en un plazo relativamente corto”, explica Gentile.
Los criterios para la selección de la empresa
Un aspecto a destacar es que el proceso de selección para esta licitación se centra en dos aspectos fundamentales: la unidad de colectivo a utilizar y el proceso de retrofit propiamente dicho.
De esta manera, el funcionario revela: “La evaluación técnica, económica, los plazos de entrega y la experiencia en reconversiones similares serán cruciales”.
Además, existe la opción de que las empresas participantes ofrezcan el chasis reconvertido, dado que MOVI suele utilizar trolebuses de su propia flota.
A pesar de ser la primera vez que la compañía estatal realiza una licitación de este tipo, ya hay interés de diversas empresas.
Invento, que desarrolló el prototipo inicial y trabajó en los tres trolebuses reconvertidos, es una de ellas. “También nos contactó la gente que hizo la experiencia del bus eléctrico en Jujuy, y aunque su enfoque es más hacia buses autónomos, tienen interés en nuestro proyecto”, menciona Gentile.
¿Y los tiempos?
La experiencia previa indica que el tiempo promedio de conversión es de unos cuatro meses por unidad, pero con suficientes recursos, este plazo podría reducirse a entre dos y tres meses para lotes de dos o tres coches.
Por eso, el especialista detalla: “La relación es inversamente proporcional: a mayor cantidad de recursos asignados, los tiempos se reducen”.
MOVI prevé un plazo total de ocho meses para la reconversión de las unidades durante el próximo año.
Rendimiento de los trolebuses convertidos
Actualmente, los vehículos reconvertidos están en funcionamiento y demostraron ser eficientes.
Con cuatro unidades en servicio y un quinto en proceso, el mantenimiento se centra en las “partes mecánicas y preventivas”. Los ajustes iniciales en los parámetros del control del motor aseguran un funcionamiento óptimo en las diversas condiciones de la ciudad.
Estos trolebuses toman corriente directamente de la catenaria con sus lanzas, eliminando la necesidad de recarga constante.
“El próximo paso es agregar un sistema de batería para lograr autonomía y realizar cualquier recorrido en la ciudad” adelanta Gentile.
Expansión del retrofit y marcas chinas
De este modo, el proceso de retrofit no se limitará únicamente a la renovación de la flota de trolebuses: la empresa evaluará tecnologías de GNC y otros coches eléctricos, principalmente de marcas chinas.
Aunque aún no hay planes concretos, MOVI Rosario está considerando la posibilidad de adquirir o hacer leasing de buses eléctricos chinos para pruebas iniciales.
Es así que el funcionario indica: “Estamos en una etapa de investigación de productos y disponibilidad”.
La licitación en detalle
La convocatoria, que inició el 8 de julio y se extiende hasta el 8 de agosto de 2024, busca la participación de empresas nacionales que puedan cumplir con los requisitos técnicos y de experiencia.
Aquí, cabe destacar que la Municipalidad de Rosario realizará una inversión superior a los 1.500 millones de pesos para mejorar la línea K, compuesta íntegramente por trolebuses.
La empresa adjudicataria se encargará de recarrozar, reconvertir y adaptar los coches de diésel a eléctricos, incorporando motores eléctricos 0 km, butacas nuevas y dispositivos tecnológicos.
Estos vehículos no solo serán cero emisiones, sino que también representarán una renovación integral tanto en el interior como en el exterior, con piso bajo para asegurar accesibilidad y sistemas de climatización avanzados.