No se puede pensar en una transición energética sin respaldo gubernamental. Ese fue el punto de partida para debatir entre fabricantes de vehículos eléctricos, proveedores de infraestructura de recarga y empresas de renting que se posicionaron sobre la necesidad de incentivos para la electrificación de flotas y el desarrollo de la infraestructura de carga.
Patricia Baires, Latam Business Development Manager en Blink Charging, destaca la libre competencia en este contexto.

Patricia Baires, directora de Desarrollo de Negocios para Latinoamérica de Blink Charging
“Deben existir exoneraciones de productos a nivel de importación, beneficios y apertura para la libre competencia, tanto para empresas locales como extranjeras”, señala.
No todos los países tienen la capacidad interna para desarrollar productos localmente.
La falta de legislación y apoyo a empresas extranjeras obstaculiza el progreso en la región latinoamericana, a pesar de contar con la tecnología necesaria para acelerar la adopción de vehículos eléctricos.
Si bien en los últimos años estuvo en auge la inclusión de estándares en las legislaciones para facilitar la transición, Baires plantea una preocupación.
“Si eso se hubiera implementado años atrás, habría detenido significativamente el crecimiento, el desarrollo y la transición que buscamos”, asegura.
Esto se debe a que en la región se enfrentan desafíos en términos del acceso a una cantidad suficiente de vehículos eléctricos directamente de los fabricantes, lo que limita nuestra capacidad para influir en la tecnología y adaptarla a las necesidades específicas de cada país.
No se trata solo de la diversidad de tipos de conectores, sino también de adecuar la tecnología del vehículo para que sea compatible con las condiciones locales.
Allí entra en juego la libre competencia: “Esto nos obliga, como fabricantes de cargadores, a desarrollar tecnología que se ajuste a las necesidades de los vehículos disponibles en el mercado”.
Por otro lado, Rosalba Barrios, Marketing & PR Director de BYD Trucks, brinda su punto de vista desde la fabricación de vehículos.

Rosalba Barrios, Marketing & PR Director de BYD Trucks
Más allá del apoyo gubernamental, aboga por la regulación de las tarifas de las flotas eléctricas.
«Es importante establecer tarifas eléctricas diferenciadas según el horario de recarga, lo que podría ayudar a ajustar la operación de nuestros clientes finales», explica sobre los incentivos.
Barrios también ve un gran potencial en los parques industriales para fomentar la adopción de vehículos eléctricos en el sector empresarial.
“Deberían tener espacios destinados a la recarga para motivar a las empresas a adoptar esta tecnología de manera inmediata», dice.
Y agrega: “A veces, las empresas, especialmente el área de finanzas, pueden ver la adopción de flotas eléctricas como un gasto más que como una inversión estratégica”.
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Jorge Luis Montoya Zapata, Environmental Management Leader en Renting Colombia
Por su parte, Jorge Luis Montoya Zapata, Environmental Management Leader en Renting Colombia, se suma al llamado de apoyo gubernamental.
A pesar de que en Colombia se promulgaron normativas que respaldan la transición energética, como la Ley de Transición Energética y la Ley Verde, considera que hay aspectos importantes que deben tenerse en cuenta, como la disponibilidad de estaciones de carga o electrolineras.
“Es responsabilidad del Gobierno generar incentivos y ampliar la cobertura de instalación de electrolineras en todo el país”, subraya haciendo énfasis en las zonas rurales.
Montoya Zapata también destaca el papel que cumplen los bonos verdes y los beneficios tributarios asociados como instrumentos financieros para respaldar proyectos ambientales.
“La disminución de impuestos y los aranceles son aspectos importantes a considerar también”, dice.